De un día para el otro, recibió un llamado inesperado que puso su mundo de cabeza. Estaba a punto de comenzar a los ensayos de Rapunzel pero, tras haber sido convocada para protagonizar Sugar, ni lo dudó. Laurita Fernández renunció a su compromiso laboral y apostó por la obra teatral que, en el pasado, protagonizaba Griselda Siciliani.
Finalmente, el día tan esperado llegó. Al mismo tiempo que Laurita debutó en el teatro, se reconcilió con Federico Bal. Claramente, el joven la fue a ver. ¡Y le llevó un regalo más que especial! Al menos, para él. En una entrevista en Cortá por Lozano, el actor reveló que le envió su novia al camarín un obsequio: "Le regalé algo para que use todos los días en el camarín. Yo no soy tanto de regalar flores o bombones. Le regalé una batita y cositas femeninas".
Lejos de dejar el tema ahí, ella contó que el regalo le gustó pero que se sintió avergonzada al lucirlo: "Fede me regaló una bata. Ok... Quería algo que me sirva, pero discreto… ¡Y me regaló una bata de seda roja! El otro día salí del camarín medio escondiéndome, para que no sepan que era yo. Igual, me comí algunas gastadas".
¿Le gustó o no le gustó?
Por Agustina Rinaldi
¿Da o no da?
