Rodrigo Lussich protagonizó una fuerte caída al aire de Intrusos el jueves pasado. El conductor ha instalado un personaje muy divertido en el programa de espectáculos donde baila y salta todo el tiempo. Pero el piso resbaladizo le jugó una mala pasada y terminó protagonizando un blooper.
A pesar que el mismo aclaró ese día que estaba bien y sin dolor, el calvario llegó después cuando estaba en su casa ya que la inflamación se enfrió y lo dejó "duro" del dolor.
"Terminé con una inyección, vino una ambulancia a mi casa", explicó el conductor el día posterior a la fuertísima caída.
Y agregó: "Estaba con una contractura de cuello de hace un tiempo, que la iba llevando, ya muy leve. Pero tenía torticolis. Y cuando me caí, para no golpearme la cabeza contra el piso, por acto reflejo tensé el cuello. Ahí me dio un latigazo fuerte en la contractura. Pero nos pusimos a bailar y seguimos", continuó Lussich.
Pero no terminó bien el día: "Pero eso después se enfrió. Anoche, otra que Tusam. Estaba duro, duro, duro. Terminé con una inyección, vino una ambulancia a mi casa. Fue larga la noche".
Esa noche se habían juntado a cenar con las compañeras de Intrusos y un estornudo le arruinó la noche: "Yo estaba bastante bien dentro de todo y cuando estornudé -¡muy vieja!- vi las estrellas. Después quedé totalmente duro, casi irrecuperable. Hasta que tuvo que venir la ambulancia a casa, y estoy, no digo como nuevo, pero bastante entero".