A veces, los cambios de vida más necesarios llegan después de un susto importante. Eso fue lo que le pasó a Gastón Marote, que luego de sufrir un pico de presión durante la cuarentena en 2020, decidió bajar de peso.
Y su esfuerzo sostenido en el tiempo tuvo su recompensa: a unos pocos meses desde que se propusiera modificar sus hábitos por otros más saludables, Marote logró rebajar casi 40 kilos, una transformación física que se traduce en un enorme bienestar.
“La cosa arrancó de un día para el otro, cuando un pantalón ya no me abrochaba”, contó el panelista de policiales de Nosotros a la mañana sobre ese momento clave en el que llegó a su casa sintiéndose mal: “Sentía que flotaba. Me tomé la presión y me dio 19.4 la máxima y 14.6 la mínima, lo cual es un montón”.
“La cosa arrancó de un día para el otro, cuando un pantalón ya no me abrochaba”.
¿Cómo hizo para cumplir su meta? “Primero comencé a reducir las porciones y a adquirir comida más sana”, dijo. Y a dos meses de empezar, pidió ayuda a una persona experta en nutrición para mejorar sus hábitos de alimentación.
Pero, para Gastón, fue la contención de su pareja la clave para atravesar este proceso. “Ella es mi sostén”, aseguró el periodista, que llegó a pesar 133 kilos.
Hoy por hoy, el profesional de El Trece está muy contento y satisfecho con todo lo que logró en estos nueve meses: “Te ves mejor, la ropa te entra, puedo tirarme al piso a jugar con mis hijos”. Y destacó detalles notables a nivel salud: “Antes se me entumecían las manos, tenía los pies hinchados, me dolía al agacharme”.
“Mucha gente que me ve en televisión capaz piensa que bajar de peso requiere de una inversión grande de dinero, y la verdad es que la inversión es de tiempo y sacrificio, nada más”, señaló.
Y cerró: “Dejar de comer un poco, cambiar la alimentación y hacer ejercicio en casa no requiere de dinero. Solo es hacer un sacrificio e invertir tiempo para estar mejor”. ¡Felicitaciones!
