No se sabe qué golpe es peor: chocar con una locomotora disparada sin frenos a 500 kilómetros por hora, recibir las facturas de gas, luz y agua tras la quita de subsidios, o ser blanco de una crítica de Luli Fernández en la tele. Desde que está en Socios del espectáculo, la modelo se convirtió en una implacable panelista que cuando no da una info opina de manera contundente. Al que le dio "su merecido" ahora fue a Nico Occhiato, al que acusó de soberbio, agrandado y creído. Seeeee, todo eso al mismo precio.
En el programa mañanero del 13 informaron de una grave y escandalosa pelea entre Occhiato y Florencia Vigna en una de las últimas grabaciones de "El último pasajero", el ciclo que conducen, curiosamente, los ex novios en Telefé. A alguien se le ocurrió que el morbo de verlos juntos otra vez podía rendir (ella ahora está en pareja con Luciano Castro, y él sigue soltero pero "picoteando" por todos lados) y los juntó atrás de cámaras. El diario del lunes dice que tuvieron más problemas que rating.
Luli Fernández quiso obtener mas información sobre "el caso" y, como siempre hace, le mandó un mensajito a Occhiato. Si le contestaron Alina Moine y el Muñeco Gallardo para hablar de su romance, nada más y nada menos, supuso que el pibe de Villa Luzuriaga correría a responderle. Pero no sucedió: las dos rayitas que se pusieron celestes no fueron el preludio de una devolución, sino un mensaje inequívoco de "te leí, sí, pero no me interesa contarte algo".
Entonces, la modelo y firme candidata a panelista revelación de la temporada (si existiera premio semejante) se despachó a gusto y placer en contra de Occhiato. "Intenté comunicarme con él, le mandé un mensaje y me clavo el visto. Todos dicen que es así, que no responde nunca. Lo que se dice de él es eso: que desde que Mario Pergolini lo subió al ring de la pelea grande está agrandado y en un nivel importante de soberbia", arrancó.
"Está un poco creído, eso es lo que me cuentan -continuó Luli sin que se le moviera un músculo de la cara, porque algo que tiene es eso, puede dar la data más caliente sin inmutarse-. A ver, lo que se dice entre la gente que trabaja allí es que se cree el Susano Giménez de Telefe. Esto que parece una broma es en serio". Un poco para darle más sustento a eso, tanto Adrián Pallares como Rodrigo Lussich suscribieron sus palabras. "Dicen que Vigna le gritaba que se agrandó y que en el equipo de trabajo nadie lo quiere", tiró el uruguayo.
"Lo que saben la verdad, siempre, son los técnicos. Los que trabajan con ellos. Y es muy sabido que la gente que trabaja con él varias veces ya le marcó que llegan regalos o canjes y ellos, los laburantes, no reciben nada. Se quejaron, se lo hicieron saber, pero no tuvieron ninguna respuesta", comentó Luli, la nueva justiciera de la pantalla chica.
