A fines de octubre de 2016, Miriam Lanzoni (38) comenzó a intercambiar mensajes con Christian Halbinger. Por entonces eran simples conocidos por intermedio de amigos. La actriz estaba recientemente separada de Alejandro Fantino y armando su nueva vida. Las comunicaciones avanzaron y avanzaron hasta que llegaron los encuentros que marcaron un antes y después. Desde entonces, la curvilínea y el dueño de una empresa de juegos de casino –papá de dos hijos– no se separaron más. Compartieron todo tipo de reuniones sociales, experiencias de viaje –entre ellas la pasión por los deportes acuáticos– y el amor se fue haciendo cada vez más intenso. Incluso, en el pasado verano, mientras ella hizo la temporada de la obra Como el culo, en Villa Carlos Paz, él la fue a visitar varias veces, dejando en claro el interés por su novia.
Hasta que, en febrero, empezaron a conocerse unos primeros indicios de posible embarazo. La artista había confesado sus ganas de convertirse en madre primeriza e, incluso, el año pasado estaba en sus planes adoptar un niño extranjero. Pero el comienzo de año le trajo vómitos y mareos que empezaron a llamar la atención de sus compañeros de elenco. Y su presencia en el sector de maternidad de una clínica en Córdoba abrió aún más las sospechas de embarazo. Pero, quizá prudente, hasta pocas semanas antes, en la presentación de la película La reina del miedo, Lanzoni dijo que iba a comenzar con la búsqueda después del Mundial. Hasta que, en las últimas horas, en las redes sociales publicó una ecografía donde se observa a un embrión con varias semanas de gestación bajo el escrito “la mejor noticia del mundo”. A buen entendedor, pocas palabras… ¡Felicitaciones!
Lanzoni embarazada
En la dulce espera
