Pequeñas pistas, indicios, imágenes encriptadas, hasta que finalmente se develó del todo. Rocío Oliva está de novia, después de su mentada relación con Diego Maradona, ahora disfruta de las mieles del enamoramiento con Bernando Buratti.
Hace varias semanas, los medios del espectáculo se convulsionaron con un simple videito, en el que solo se veía una mano de hombre apoyada en las piernas de Oliva, con un fuego en una chimenea de fondo, que decía: “Mi sábado preferido”. Desde ahí se intensificaron las averiguaciones, mientras la blonda evadía las preguntas.
Con el transcurso del tiempo, la panelista fue agregando más pruebas, como un videito en Instagram, de una parrilla, una copa de vino y una frase: “Con mi love (amor)”. Más adelante, Rocío mostró unos barbijos muy top, de alta costura, que le regaló Claudio Corsano, el afamado diseñador. Ahí contó que le mandó varios modelos y que incluso le envió para su novio.
Como migas en la historia de Hansel y Gretel, Oliva fue plantando distintas pruebas, dejando evidencias de su corazón captado por un hombre. Y todo quedó expuesto con la entrevista que brindó ayer en La jaula de la moda, donde aportó muchísimos más datos.
Así, la ex de Maradona describió que lo conoció en Brasil este verano, que él tiene un hostel en Río de Janeiro y que es hincha de River como ella. “Estoy bien. Encontré a un hombre que es compañero, que me da para adelante en todos mis proyectos tanto en lo laboral como en lo personal y es mi confidente“, reveló.
En cuanto a la posibilidad de convivencia, Oliva manifestó: “No porque él está trabajando y yo también y es un poco complicado. Igual, yo le dije en un momento ‘hubiésemos pasado una parte de la cuarentena juntos’. Salió en una charla la posibilidad de pasar la cuarentena juntos para conocernos más, aunque sea una etapa. Yo le dije que sí y después quedó ahí. Después se lo recordé de nuevo pero no vivimos juntos”.
A la hora de referirse a los planes de pareja, Rocío fue cauta y explicó: “Va todo encaminado. Lo que más le digo siempre es que me gustan sus besos. Es todo muy reciente y el camino es muy largo. No me apuro a nada y tampoco es mi prioridad el casamiento”.
