Días atrás y en tanto la mirada de todos estaba puesta en los pilotos más importantes del mundo que participaban de la primera edición de entrenamientos libres del Gran Premio de Gran Bretaña de Fórmula 1 hubo alguien en particular que acaparó la atención del resto.
Por la importancia que tiene para Lewis Hamilton y por sobre todo lo que significa para él en un encuentro tan importante como este, la imponente entrada que hizo bajo la lluvia a la jornada en cuestión al predio con su perro, un buldog llamado Roscoe, recorrió el mundo.
Es que para los fanáticos de este deporte y fieles seguidores de la carrera profesional del piloto británico, bien saben que la mascota pasó a funcionar como una especie de cábala para Hamilton, que siempre lo lleva consigo a eventos como este.
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Y así como no es la primera vez de esta dupla, no por ello se dio con menos brillo que las anteriores. Es que Lewis ingresó al predio con mucho estilo y elegancia, luciendo un total look black y paraguas rojo con el logo de la escudería Ferrari al tiempo que iba escoltado por el animalito.
ROSCOE, EL PERRITO FAMOSO DE LA SUERTE
En tanto caminaban hacia el interior del lugar y se preparaba para la primera tanda, Hamilton y Roscoe fueron acompañados por las cámaras que hacían la cobertura y que bien saben de la importancia que tiene para el corredor su compañero incondicional.
Y sin dudas, una vez más el perrito le trajo suerte ya que Lewis lideró en encuentro dejando atrás a los McLaren de Norris y Piastri, así como también a Franco Colapinto quien se ubicó en el puesto 15 de este encuentro que se dei en una jornada de cielo gris y lluvioso. Eso en la clasificación, porque en la carrera sucedió otra cosa. Colapinto ni siquiera pudo largar, Hamilton terminó 4to, Piastri 2do y el ganador resultó el local Lando Norris.
