Durante los últimos días, el Liverpool se convirtió en noticia por el accidente que terminó con la vida de Diogo Jota y su hermano André Silva. El jugador de fútbol se había casado hace una semana y atravesaba un gran presente, pero todo terminó en cuestión de minutos.
Virgil van Dijk llegó con una corona de flores en forma de camiseta con el número 20, la de Jota, al funeral. Andy Robertson llevó otra con el número 30, por André. El DT del equipo viajó con el resto de los jugadores y confesó: “Fue un golpe durísimo, estamos todos destrozados”.
El último adiós fue en Gondomar, lugar donde Jota creció. Fue a las 10 de la mañana donde los féretros de los hermanos fueron acompañados por familiares, amigos, compañeros y hasta algunos vecinos de la zona, todos en silencio.
“Estos son días realmente, realmente tristes, como pueden imaginar. Pero hoy demostramos que somos una gran familia unida. Su espíritu estará con nosotros para siempre”, agregó alguien desde la Selección de Portugal. Algunos de los jugadores presentes fueron: Bruno Fernandes, Bernardo Silva, João Félix y João Moutinho.
EL GESTO DEL LIVERPOOL
Rúben Neves, mejor amigo del jugador de fútbol protagonizó un desgarrador momento cuando pidieron un minuto de silencio en el último partido que jugaron para recordar y homenajear a Diogo, quien falleció en un terrible accidente.
Liverpool tomó una decisión que emocionó a todos: pagará el resto del contrato de Jota y enviará ese dinero a su familia. La esposa del jugador, Rute Cardoso, presenció todo sin despegarse del ataúd. Se habían casado hacía apenas diez días.
