Dio una nota y la gente advirtió rápidamente sus notables cambios estéticos. "Consigue todo por él y aprovecha" denunciaron los seguidores del realitie.
Cuando salga de Gran Hermano -sea ahora o en la final, con el título o sin consagración- Martín Ku afrontará una instancia clave y decisiva para su vida: todo será nuevo para él. La exposición, pesar de anónimo a famoso, ganar mucha guita por sacarse una simple foto, los stream, las notas, los periodistas dando vueltas... y su novia. Si, ella también. La ya renombrda y controversial Marisol fue acusada de "tunearse toda" con los canjes que consigue gracias a su chico.
Siempre polémica y dispuesta para entrar en contacto con la prensa ("A esta chica le gustan más las cámaras que el dulce de leche" se quejan sus destractoras, pues en su mayoría recibe críticas de mujeres) Marisol asistió a un programa de stream que conduce Gastón Trezeguet, quien ha declarado abiertamente su favoritismo por Furia y su deseo de que la Pelota se quedé con el premio mayor, ese por el que también pelea el Chino.
Pero más allá de lo que pudo haber dicho o de las cosas que se pudo haber guardado, lo que llamó la atención (mucho, para ser sinceros) fue otra cuestión. Otro aspecto. O precisamente eso, su aspecto. De inmediato la gente empezó a notar que Marisol estaba muy cambiada. De nuevo: no en su forma de pensar ni de expresarse, algo que le valió ya muchos reproches, sino en su fisonomía. Sobre todo del cuello para arriba.
Siendo que es un blanco casi fijo de cuestionamientos y reproches, Marisol empezó a ser bombardeada nuevamente por aquellos que han hecho del mundo digital (sobre todo Twitter) una especie de "segunda casa" de Gran Hermano. Allí mismo donde se arman "movidas" para votar a tal o cual jugador o se decide apoyar o cancelar a otros empezaron a advertir el cambio, la diferencia, la modificación.
"Pero esta muchacha se hizo nueva", "La que está hablando ahora es Marisol o es otra" "Chicos, chicos, nos cambiaron a la novia del Chino", pobre el Chino muestrénle una foto de la nueva Malisol porque cundo salga de la casa no la va a reconocer siquiera" fueron solo alguno de los mensajes que tardaron minutos -o segundos- en aparecer. Total, agarrar el celular y apretar 40 o 50 teclas no cuesta demasiado.
Pero eso no fue todo. Para nada. Porque hubo muchos que fueron más allá y directamente echaron a rodar sus malos pensamientos. "Che, está usando los canjes que consigue gracias al Chino, eso no se hace" la acusaron de manera directa, aunque la palabra "acusar" es un poco fuerte ya que, aun si fuera "culpable" no estaría cometiendo ninguna ilegalidad sino que le estaría sacando provecho a la corriente de afecto, simpatía y cariño que generó su novio.