Si hay una virtud que caracteriza a las chicos es, sin duda, la sinceridad. Y las hijas de Wanda Nara lo demostraron al "plantarse" ante su madre y "exigirle" que cambie un vestido de 1.500 euros de una de las marcas más conocidas del mundo, que la conductora le compró a cada una porque no les gustó el modelo. "Parece cuando te operan y te ponen ese traje azul...".
“Mi mamá siempre nos compra cosas de preppy. Este es un vestido de Preppy que no nos gusta”, comenzó Isabella, de 7 años, en un video que hizo junto a su hermana mayor, Francesca, para Tik Tok. Y, luego, en complicidad con Wanda, las nenas llegaron a un pacto...
"Si bajamos y Nora (Colosimo) dice tres veces ‘¡qué lindas!’, nos los quedamos, si no, ma, los tenés que devolver. Ahora cortamos, nos probamos esto y volvemos”, planteó Francesca. Luego de llegar al acuerdo, las nenas abandonaron la planta alta de la casa y bajaron al encuentro de su "nona".
"No puede ser… Mi mamá nos compró este vestido preppy y mi mamá se compra cosas cancheritas como estas botas”, reclamó Isabella, mostrando el calzado que había adquirido Nara. “Bueno, ahora vamos a ver cuál es la reacción (de Nora, su abuela). Tiene que decir tres veces ‘¡qué lindas!’, y nos los quedamos, si no los devolvemos", insistió la hija más grande de Mauro Icardi.
QUÉ PASÓ CON LOS CARÍSIMOS VESTIDOS
Francesca e Isabella bajaron al salaron y posaron ante la atenta mirada de Nora que tuvo, para sorpresa de las chicas, una inesperada reacción. “Me encanta. ¿Qué tengo que decir?. Me da impresión. Wanda y Zaira cuando eran chiquititas. Me encanta. Me recuerdan a Wandita y Zairita. Yo las vestía con vestiditos largos, así a las dos iguales siempre y están divinas”.
“Parece cuando te operan te ponen ese traje azul”, señaló Francesca, lo que generó la respuesta de Wanda, intentando marcar la diferencia. “A nadie le ponen un vestido de Gucci cuando lo operan”, dijo. Pero Isabella, sin filtro, fue al hueso con su veredicto: "es Horrible".
"No, Ma, devolvélo", insistió Francesca. Y, a modo de remate, Colosimo, generó risas sobre la situación: "Qué desagradecidas. Y a mí que no me entra".
