Al mejor estilo de las estrellas estadounidenses, Zaira Nara (30) lanzó su línea de cosmética. Desde un coqueto salón del hotel Four Seasons, la conductora de Morfi, en las mañanas de Telefe, presentó veinticinco productos esenciales de maquillaje. “El precio es razonable. Nadie quiere pagar por un labial lo mismo que por una cartera”, reflexionó la hermana de Wanda, mientras disfrutaba del evento que organizó, acompañada por Verónica Lozano, Paula Chaves, Guillermina Valdés, Geraldine Neumann y Sofía Zámolo, entre otras famosas. “Organicé el evento con listado de invitados de por medio, y reconozco que me incomodó poner a la gente en el compromiso de venir”, se sinceró la mamá de Malaika.
Pero este no fue el único cambio que está teniendo la modelo en su vida. Con su pareja, Jakob von Plessen, con quien está desde 2015, dejaron atrás la vida en una gran casa de Tigre para mudarse a San Isidro. El motivo incluyó las ganas de Zaira de estar más cerca de su lugar de trabajo, y así evitar pasar dos horas por día arriba del auto. “Resignamos verde y apostamos a algo más chico y práctico. Encontramos una casa que remodelamos”, contó quien se queda a cargo de la casona por largos períodos en el año, mientras el papá de la nena se instala en la Patagonia y en Africa, donde organiza cabalgatas y excursiones para extranjeros.
Mali, la primogénita de la modelo, acaba de terminar la adaptación en el jardín, en un colegio alemán, fiel a la ascendencia austríaca de su padre. “No soy una mamá dependiente, la recontra suelto. Hay momentos en que me pongo la familia al hombro, pero no puedo con todo. Es muy difícil tener las antenas prendidas todo el tiempo. Quiero ser una mamá independiente, hacerle la viandita a mi hija, dar una nota, llevarla al colegio, conducir Morfi, todo”, reconoce mientras repasa el maquillaje de su rostro, como buena empresaria que da sus primeros pasos, con sus propios productos.
Por más… En adelante, aparte de los desafíos profesionales y de acompañar la crianza de su hija de casi tres años, Zaira proyecta más cambios. “Estamos en el momento en que todos nos preguntan para cuándo el hermanito. Vamos a dárselo pero no estamos desesperados. No nos corre ningún reloj. Cuando estoy en el sur –la nena y ella van y vienen– me visualizo con cuatro hijos y me encanta. Pero al volver a Buenos Aires me doy cuenta de que amo lo que hago. Para la familia numerosa tenés que resignar cosas. Quiero estar presente en la vida de mis hijos sin descuidar la propia. Es una negociación interna constante. Recién ahora empiezo a dormir de corrido y a tener un rato de charla con mi marido. Pero uno más me encantaría. A esta altura, no sería una sorpresa que quede embarazada. Y el casamiento vendrá en unos años. Con los hijos crecidos, durante algún viaje, seguramente”, confió. Cambia, todo cambia.
Valdés estuvo con Zaira en el lanzamiento de este emprendimiento.
Vero Lozano también la apoyó.
¡Qué glamour!
