Benjamín Vicuña viene siendo uno de los grandes protagonistas de los portales de espectáculos durante estas últimas semanas. Desde que se desató su inesperada guerra contra la China Suárez por el viaje de sus dos hijos en común -Magnolia y Amancio- a Turquía, una fuerte tormenta comenzó a caer sobre el actor y desde entonces no ha podido tener tanta paz.
En medio del escándalo, Vicuña recibió una buena noticia por estas horas: sus pequeños regresaron de Estambul tras haber estado 20 días conviviendo con la China y Mauro Icardi, el novio de la actriz. Para el chileno no ha sido nada fácil surfear esta ola, ya que a la polémica se le suma un fuerte bajón anímico que atraviesa por diferentes factores, pero que principalmente viene desde el distanciamiento con sus pequeños.
Los golpes para Benjamín comenzaron hace unos meses cuando la China explotó con un agresivo y escandaloso posteo en sus redes sociales. En aquella publicación, denominada ‘el papá del año’, la actriz criticó miles de actitudes de su ex de cuando eran pareja tildándolo de infiel y hasta adicto, aunque el golpe más fuerte fue al cuestionar su rol como padre, ausente y desinteresado. Esto no le cayó nada bien al chileno, que rápidamente habría entrado en una crisis emocional.
Lo cierto es que, por estas horas y como bien decíamos previamente, Vicuña volvió a encontrarse con sus hijos y algo de tranquilidad llegó a su vida. Pero por estas horas habló con Tatiana Schapiro en una entrevista para Infobae y dio detalles del momento crítico que atraviesa, tratando de entender de esta nueva vida a la que fueron arrastrados sus dos pequeños.
BENJAMÍN VICUÑA CONTÓ CÓMO SE ADAPTA A LA NUEVA VIDA DE SUS HIJOS EN TURQUÍA
“Me tocó vivir cosas muy fuertes en la vida. Y de esas cosas fui aprendiendo. Es cosa de tiempo pero algunas cosas jamás voy a terminar de entender. Que mis hijos hoy estén a 13.000 kilómetros es una nueva realidad que tengo que asumir y entender. Lo estoy procesando”, comenzó explicando Vicuña con un dejo de dolor y hasta confusión. Definitivamente, le cuesta esta etapa que vive con dos hijos más chicos.
Más allá de que entiende que debe priorizar el bienestar de los menores, para Benjamín no es nada fácil esta posición en la que se encuentra: “Obviamente que siempre teniendo en cuenta que lo primero y lo principal es el bienestar, la felicidad de ellos. Pero también hay un padre, hay hermanos, hay una nueva realidad, hay que, eso, acomodarse. Y en algún momento entenderé el porqué de todo lo que ha pasado este último año. De cómo se dio. Quizás algunas cosas no las voy a terminar de entender nunca y quizás otras sí”.
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Tras afirmar que prioriza su rol de padre y la unión familiar, Vicuña se mostró vulnerable por esto que vive hoy: “Yo siempre voy a hablar de mis hijos porque son mi vida, son mi motor, son mi ilusión. Pero sí me preocupa que por momentos este año pasaron a ser el foco de atención o a tener un nivel de protagonismo que no me gusta. No me parece”. ¿Un palito a la China por la exposición que están teniendo los pequeños además de estos viajes constantes de Argentina a Turquía?
