Hay un dicho popular que asegura que las segundas partes nunca fueron buenas. Pero como cada quien debe vivir su propia experiencia, pareciera ser que Luciano Castro(43) y Sabrina Rojas(38) no atienden a aquella afirmación. Porque después de haber anunciado su separación, apenas comenzado el año, el actor y la modelo decidieron volver a intentarlo.
Noticia inesperada. Nadie calculaba que la pareja anunciaría su ruptura. Es que Sabrina y Luciano formaban una de esas parejas estables y consolidadas. A pesar del mote de galán de él, la modelo supo mantenerlo a raya, situación que evidenció Marcelo Tinelli durante la participación de la rubia en el Bailando, versión 2016. Recordemos que en el certamen de baile la modelo contó que había puesto a su marido en el freezer. "No se estaría portando muy bien y cuando me pinte lo saco. Así nomás", le había dicho al conductor. Lo que vino después fue una disculpa pública del actor de 100 días para enamorarsehacia su esposa. "Me equivoqué… Quizás antes no hubiera pedido ni disculpas, y nuestra pelea hubiera durado mucho más de lo que duró. Hoy no, hoy pido perdón", dijo él entonces. "Que todos sepan que estoy arrepentido", sumó, y todo retomó su cauce. Ya nadie volvió a hablar de ellos como pareja, porque no había nada que decir. Hasta que una serie de misteriosos mensajes en Instagram puso sus nombres en el tapete. ¿Luciano estaba engañando a Sabrina? ¿Ella lo acusaba de maltratador? "Por fin me voy a librar… te voy a sacar la careta. Te respeté mucho tiempo. Lloré y callé. Lamento todo lo que va a suceder después, no por vos, sino por toda la gente que realmente te quiere y por todos los que creen que sos una gran persona… sobre todo tres que te 'admiran'", decía el primer mensaje. "Al psicópata, violento, drogadicto, y puedo seguir, alguien lo tiene que parar", seguía.
Pero rápidamente, la modelo anunció el hackeo de su cuenta y la de su esposo. Y si bien algunos miraron con desconfianza la explicación, en la que refería que ella no había denunciado a nadie y que por eso no había nada que aclarar, nadie volvió a hablar del asunto hasta que –finalmente– el 7 de enero confirmaron su separación. Lo hizo la modelo en un móvil con Intrusos, donde culpó al desgaste y a la rutina de tamaña decisión. Allí, además, explicó que se encontraban de vacaciones en Mar del Plata, ciudad que visitan cada verano, en familia con sus hijos, Esperanza(5) y Fausto(4). Pero, claro, el inesperado anuncio llevó a que los fotógrafos se apostaran cada día en la playa a la espera de algún gesto por parte de los protagonistas. Harto con las dimensiones mediáticas que había tomado el asunto y dispuesto a cumplir con algunas obligaciones laborales, Luciano regresó a Buenos Aires.
Sabrina, entonces, se dedicó a disfrutar. No sólo de sus hijos y de la playa sino, además, de algunas salidas con amigos. Incluso se permitió la ironía de postear una foto de su lomazo diciendo: “Este cuerpo estaría necesitando mucho chongo, como nunca”.
¿La reconciliación? Tan sorpresiva como la ruptura es esta especie de reconciliación que el actor y la modelo experimentan por estos días. El primer indicio lo dio Sabrina cuando –con su ex de vuelta en Mardel– compartió un video en el que se los ve a ella, a Esperanza y a Luciano bailando animadamente. Después fue el turno de él, que compartió una tiernísima foto de ambos, y más tarde ella volvió a la carga compartiendo un video de una velada con amigos en la playa de noche, donde cantan y bailan. Pero como dijimos, aquellos fueron sólo indicios. Hasta que llegó la prueba irrefutable. Sabrina y Luciano fueron captados por el fotógrafo de Gente en el balneario Play Beach a los besos. Mimos, sonrisas y miradas cómplices formaron parte del combo. Entonces se volvió a hablar de amor. Y fue Angel de Brito quien avisó: “No están reconciliados, pero mejoró la relación. ‘Estamos ahí, pero quizás en 20 días estemos mal de nuevo’, dicen ellos”. Y claro, tanta atención sobre ellos molestó al galán, que le mandó un mensaje a De Brito. “Basta, loco; ya bastante con cómo la estamos pasando nosotros para lidiar con ustedes. Córtenla. Puse la foto porque es mi Instagram", cerró furioso.
Sabrina Rojas y Luciano Castro, a los besos
Sabrina Rojas y Luciano Castro, a los besos
