La primera noche de María Becerra en el Monumental ya había quedado escrita en la historia antes de que terminara el show. No solo porque se convirtió en la primera mujer en llenar River, sino porque sobre ese escenario gigante ocurrió uno de los momentos más íntimos, conmovedores y reales que se recuerden en un recital reciente.
Un instante inesperado, lejos del despliegue técnico y las luces, que terminó quebrando en llanto a la propia protagonista. Tras sufrir durísimos golpes dentro de su vida en estos últimos años, María fue expuesta a un momento impactante. Y que resumió el dolor que le tocó atravesar con sus dos embarazos perdidos (el primero en septiembre de 2024 y el segundo, más grave, en abril de 2025).
El episodio se dio mientras sonaba “Mi Amor”, la canción que Becerra interpreta junto a su novio J Rei y que tiene un trasfondo profundamente personal. Allí, frente a un estadio repleto, la pareja compartió algo más que una colaboración artística: expuso una historia atravesada por la angustia, el amor y la resiliencia.
Mientras cantaban a dúo, J Rei se acercó a la cantante y le mostró su brazo. María lo miró, tardó apenas unos segundos en entender lo que estaba viendo y rompió en llanto, completamente desbordada por la emoción. El público, que hasta ese momento coreaba la canción, percibió que algo estaba ocurriendo, aunque explotó cuando entendió la situación.
EL TATUAJE DE J REI PARA MARÍA BECERRA POR LOS DOS EMBARAZOS QUE PERDIÓ
La escena tuvo un peso particular porque “Mi Amor” está inspirada en uno de los episodios más difíciles que les tocó atravesar como pareja. María quedó embarazada en dos oportunidades y perdió ambos embarazos luego de atravesar un grave problema de salud que incluso puso en riesgo su vida. Durante todo ese proceso, J Rei estuvo a su lado, acompañándola y sosteniéndola en el momento más vulnerable.
De ese dolor compartido nació la canción que interpretaron en River y que, sin buscarlo, fue el escenario perfecto para ese gesto. Horas después del recital, el propio J Rei decidió explicar qué le mostró a Becerra sobre el escenario. A través de sus redes sociales reveló que se tatuó en el antebrazo el nombre de pila de la artista, María de los Ángeles, junto a una frase que resume la historia que los une: “Ahora te amo más porque compartimos unos ángeles”.
El tatuaje, íntimo y simbólico, hizo referencia directa a la canción y a las pérdidas que atravesaron juntos. Fue una manera de transformar el dolor en memoria, y la memoria en amor. Ese gesto, tan personal como público, terminó de resignificar una noche que ya era histórica para María por la parte artística y profesional, pero que pasó a ser inolvidable por lo humano.
