Nico Vázquez y Dai Fernández estarían a nada de blanquear su romance. El amor se siente en el aire, se percibe, se palpa. Ellos lo negaron ante las cámaras, meses atrás, él volvió a asegurar que no tenía “nada que anunciar” por el momento, aunque no desmintió la historia que lo relaciona con su compañera de Rocky.
Con una sonrisa pícara y dejando entrever que finalmente logró emerger emocionalmente del pozo en el que se había sumido en las semanas posteriores a su separación de Gimena Accardi, Nico Vázquez habló recientemente con Puro Show y dejó varias frases potentes flotando. “Estoy enamorado de la vida, de mí, ¡viva el amor!”, lanzó.
Y para Yanina Latorre, esa súbita efervescencia tiene nombre y apellido: Dai Fernández. Así lo sostuvo la conductora en Sálvese quien pueda (América), al dar detalles candentes de esta historia que nació en el teatro Lola Membrives, entre bambalinas y el escenario. Pero según Yani, esta intensificación también es muy nuevita: “hace 15 días hay algo fuerte”.
La conductora señaló que “todo el mundo desconfiaba o creía que pasaba algo” entre Nico y Dai aunque le aseguraron que, certeramente, la relación no tiene más de dos semanas. “Parece ser que en su momento se convirtió realmente en su mejor amiga, él se escudó mucho en ella, esta persona me jura que no había pasado nada antes”, dijo Yanina.
LAS DECLARACIONES DE NICO VÁZQUEZ SOBRE SU PRESENTE SENTIMENTAL
“No quiero hablar de mi vida privada porque hablé durante mucho tiempo, casi 30 años. En este momento, me quiero preservar”, dijo Nico Vázquez sin vueltas al cronista de Puro Show, luego del anuncio bomba de Paula Varela en Intrusos sobre el nuevo romance a punto de confirmarse.
¿Y qué dijo Nico cuando le consultaron directamente sobre Dai Fernández? “Si ustedes no están viendo nada es porque quizás no tengo nada. Con quien sea que empiece algo se van a enterar porque siempre lo hice, siempre hablé. No soy de esconderme, tengo ganas de vivir la vida y ser feliz”. El que calla otorga, dirían las abuelas. Por supuesto, ampliaremos.


