La vida personal de Laurita Fernández mutó hace varios meses, con la llegada a su alma de un nuevo amor, el que brotó con su productor televisivo Claudio “Peluca” Brusca. Tras sanar su corazón por la mediática separación con Nicolás Cabré, la blonda experimenta sensaciones hermosas.
La actriz camina por un presente lleno de estímulos, con propuestas profesionales muy interesantes, con los virajes que significaron dejar Bienvenidos a bordo y la increíble oportunidad de protagonizar Matilda en el teatro. Pero también su cotidianidad se configura en lo amoroso.
Recientemente, Laurita acaba de admitir que con su pareja ejecutaron un paso gigante, que refiere a la apuesta por una situación compleja, que acarrea sus dificultades, que puede atentar contra el sentimiento, pero que también significa subir un escalón en el compromiso: la convivencia.
En una entrevista con Revista Gente, Fernández sorprendió con el dato desconocido de la mudanza de Peluca y aportó detalles sobre el lugar que eligieron para pasar sus días juntos, así como admitió que sintió pavor y mucho temor por esta determinación.
“Ya estamos conviviendo. ¡Otro cambio más! Igual nos llevamos muy bien. Yo sobre todo, que a mí me daba un poco de cosa…”, expresó. A lo que la cronista le consultó: “¿Fue con mudanza oficial?”. De ese modo, la famosa contó: “Sí, sí, con todo. Me dije: "si lo hago, lo hago bien"”.
En cuanto a la elección de la propiedad en la que conviven, Laurita narró: “Él vino a casa y para mí fue todo un movimiento porque yo nunca había convivido con nadie full. O sea, con mis parejas anteriores cada uno tenía su lugar y elegíamos estar juntos, pero cada uno conservaba su espacio”.
Además, la actriz abrió su corazón sobre sus dudas, sus incógnitas y describió: “Esta es la primera vez que tengo una convivencia oficial con todas las letras, y tenía un poco de miedo al principio, pero todo fluyó bárbaro”. Así como agregó: “La mudanza habrá sido en abril/mayo, algo de eso, o sea que ya pasó medio año. Por las dudas no lo quememos que camina”.
Respecto a las características de la cotidianidad, Fernández sostuvo: “La verdad nos llevamos re bien. Todo es desde la buena onda, el humor y el buen trato, porque cada uno entiende el trabajo del otro y el tiempo que le dedica. Es como que también buscamos acompañarnos desde ese lugar, y a mí me resulta muy fácil la convivencia y estar con él, y espero que a él también le pase”.
