El viaje surgió de improviso. Nancy Duré asumirá un nuevo rol laboral y le recomendaron que antes de hacerlo se tomara vacaciones. De un día para el otro se subió a un avión con destino definido: Miami, Estados Unidos. A su regreso, después de disfrutar a pleno del viaje, la diosa de curvas marcadas –su relación con el también periodista Juan Abraham terminó en muy malos términos– transita sus días en cuarentena.
“Vengo de dos años muy duros con complicaciones familiares, cuestiones de salud de gente querida, trastornos laborales y desencantos sentimentales, todo junto. Estaba bastante agobiada y necesitaba volver a ser la Nancy alegre que siempre fui. Me hizo muy bien disfrutar de los afectos, de la playa y sobre todo reír, reír y reír, reconectarme con la alegría. Soy una mujer que, a pesar de haber vivido situaciones muy difíciles en muchas oportunidades, siempre trato de sacar lo positivo de la vida. Y sentí, en algún momento, que había perdido eso", comenzó.
"Por demasiados golpes, cosas que se juntaron, estrés y, quizá, buscar la contención donde no la encontraba. Me hizo muy bien encontrarme con una amiga a la que quiero muchísimo en un lugar en el que soy feliz, salir a rollear, ir a bailar salsa, comer arroz con frijoles. Volví totalmente renovada, a pesar de los nervios que pasé en el regreso”, repasó.
“Lo que pasó con el coronavirus fue realmente muy loco. Cuando me fui, hace diez días, en Argentina todavía no habían detectado ningún caso y en Florida tampoco había ninguno. Se venía hablando de lo que pasaba en Europa, pero ni en mi punto de partida ni en el de llegada había casos. Y en estos diez días se aceleró todo y se convirtió en una pandemia. Los últimos dos días allá fueron un bombardeo de información, gente que me llamaba preocupada de la Argentina y muchas noticias a través de los medios de comunicación", explicó.
"La vida allá se desarrollaba normalmente, no había alerta, había turistas, boliches llenos, restaurantes con gente comiendo. Pero sí fue un nerviosismo el tema de los vuelos porque cuando salió el decreto no sabíamos si nos iban a dejar ingresar al país. No tuve que cambiar el pasaje, sólo se demoró una hora el vuelo para reacomodar alguna gente. Pude llegar a la Argentina, estoy bien, no tengo ningún tipo de síntoma pero, por supuesto, voy a hacer la cuarentena catorce días. Mi hijo se fue a la casa del padre, me dejó comida en el freezer para que yo tenga y estaré en casa durante ese tiempo”, compartió sobre la intimidad de su cuarentena.
Con una mano en el corazón...
“Juan (Abraham, periodista) fue deshonesto conmigo. Me hizo muchísimo daño. Pero lo solté, me alejé, traté de sacar un aprendizaje de lo que fue esa experiencia. Hoy estoy con ganas de estar bien. No estoy cerrada al amor, pero sé que después de semejante traición me va a costar mucho volver a confiar en un hombre", contó.
"Pero tengo ganas de estar bien con alguien, de estar en pareja. Estoy disfrutando de mi soltería, salgo, me divierto. Aparecieron candidatos que estaban de antes y candidatos nuevos, pero tengo que estar un poquito más atenta antes de empezar una nueva historia”, compartió la periodista sobre su presente sentimental.
“Después de la cámara Gesell que hizo mi hermanita por violencia familiar (la pudieron traer al país y hoy tiene una vida sana junto a ellas), mi viejo está en juicio y la fecha es para el primero de abril. Mis hermanas y yo teníamos que viajar para declarar, pero por el tema del coronavirus el fiscal nos pidió que hagamos una videoconferencia desde el consulado de Paraguay, en Argentina. Sería genial para evitar los viajes y, sobre todo, la cuarentena después”, adelantó esperanzada, en voz alta.
