Como si de una tormenta tropical se tratara, terminó el verano y las aguas se calmaron entre Sabrina Rojas y Luciano Castro. Escándalo y supuesto hackeo mediante, la pareja anunció en enero su distanciamiento después de casi una década juntos y dos hijos en común, Esperanza y Fausto. Pero la separación oficializada ante la prensa tuvo sus particularidades, la ex pareja seguía compartiendo sus vacaciones en Mar del Plata en pos del plan familiar que ya habían organizado de antemano. Con hijos pequeños, los adultos decidieron poner paños fríos y tratar de dejar de lado sus diferencias para garantizar unas vacaciones familiares en el mejor clima posible.
No pasó mucho de la confirmación de la separación hasta que se dieron a conocer las primeras imágenes del acercamiento. Algunos mimos espontáneos entre las carpas del balneario donde religiosamente suelen hacer temporada y disfrutar de una de las grandes pasiones que tiene el actor: el surf.
Aunque todo indicaba que la pareja había limado las asperezas, una puerta que siempre habían dejado abierta, la reconciliación parecía insospechada por el tenor de las declaraciones de Sabrina. Al parecer, la incompatibilidad de caracteres, el desgaste propio que sufre una pareja sometida a una rutina que puede ser agobiante, no parecía ser tan fácil de dar vuelta, pero sorprendieron y reconfirmaron el amor que los une, nada menos que en el Día de San Valentín, como para no dejar margen a ambigüedades.
Se volvían a elegir y a apostar por su proyecto familiar, algo que habían manifestado con su paso por el registro civil, después de años de estar juntos.
Los momentos compartidos en familia volvieron a formar parte de la vida de la pareja y se los pudo ver en armonía y felices en el gran festejo de cumpleaños que le realizaron al más pequeño de la familia, con la temática preferida del pequeño: el Rayo McQueen. Si bien Fausto cumplió durante el verano, no quisieron dejar de agasajarlo como corresponde y lo hicieron a “todo trapo” o a puro canje.
Afianzados en esta nueva oportunidad, el domingo 17 le tocó a Luciano tener su festejo de cumpleaños rodeado del amor de Sabrina y sus hijos. Ella utilizó las redes para demostrarle su amor al cumpleañero y volver a aclarar que la tormenta quedó lejos: "Y así llegaron los 44. Te amo",junto a una imagen del galán soplando las velitas sobre una chocotorta de manufactura casera. Muy cerca, también, posaron sus hijos con iluminadas sonrisas.
Además, notablemente feliz, el actor lució el particular regalo que recibió de mano de sus hijos e ideado por el mismísimo Fausto, según reveló Rojas en otro posteo: "¿Qué querés que le regalemos a papá? Fausto: '¡Una remera del Rayo McQueen!' ¡Y sus deseos son órdenes para mí?’”! Orgulloso, el actor posó con su regalo, que lleva su nombre, y la imagen del personaje de la película de Pixar.
Más allá de la cautela con la que se tomaron la reconciliación, Sabrina había dicho que lo suyo era el minuto a minuto, la pareja dio muestras de que las cosas se van encaminando.
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