Hoy por hoy, si los candidatos a ganar son Furia o Martín Ku, si Virginia se hizo tan fuerte que puede llegar a la final, si el próximo eliminado será un hombre o repetirá una mujer o cómo sobrellevará Alfa su nueva estadía en la Casa no le importa a nadie. A esta hora, lo único que los seguidores de Gran Hermano quieren saber es qué son Lucía y Rosina. ¿Novias? ¿Amigas? ¿Sólo Luchi se enamoró de Rosi, o a ella también le pasan cosas?
La uruguaya y la salteña tuvieron, finalmente, su primer cara a cara y sucedió en el programa de Georgina Barbarossa, el sitio al que primero van los que son eliminados de la Casa. Después de tres meses en la vivienda más famosa del país, Rosina perdió en el mano a mano con Catalina y debió salir del juego, algo que ya había hecho Lucía con bastante antelación.
Como participantes forjaron una relación que fue pasando de cercana a estrecha, y de estrecha a íntima. Se volvieron tan compinches que el "shippeo" nació de manera inmediata y natural. La gente quiso verlas juntas y ellas llegaron hasta "ahí", pero cuando la cosa amenazaba con pasar a mayores llegó la derrota de Lucía y el vínculo se cortó. Luchi se declaró "enamorada" de Rosina, que se puso muy contenta cuando desde el afuera le gritaron que Lucía se había separado de la novia.
"Si, es verdad que hubo una atracción en la casa. Eso pasó", admitió Rosina cuando Gastón Trezeguet le preguntó por el tema. "Por el momento somos muy amigas. Nos queremos mucho. Que se yo, adentro de la casa se vive todo muy intensamente y quizás después las cosas se ven de otro modo", agregó la muchacha.
ROSINA LE ACLARO A LUCIA CUAL ES SU SENTIMIENTO POR ELLA
"Es verdad que uno tiene una confusión. A ver, no voy a negar que una atracción había. Pero qué pasaba, ella entró a la casa con novia. Tenía una novia. Entonces eso era un freno porque yo no quería tener problemas, no quería envolverme en un problema ni tampoco generárselo a ella. Nosotras somos muy amigas, recién salí y sinceramente no entiendo nada por ahora", expresó Rosina.
Sin embargo, cuando Nancy Pazos le dijo que para Lucía era importante que ella dejara abierta la puerta a una relación amorosa, Rosina le puso los puntos y enseguida gritó "¿Quéeee? ¿Una relación amorosa? Paráaaaa, es un montón. No, no, no, no, no, jejejeje", una sentencia que para muchos significó que estaba mandando a Lucía a la indeseada "friendzone" o "zona de amigos" donde nunca pasará nada.
