A mediados de diciembre, Roque, el segundo hijo de Amalia Granata, cumplió el primer añito de vida. Fruto de su relación con Leo Squarzon, para los papis la llegada de la fecha tuvo un sabor especial. No sólo porque decidieron apostar a un festejo a todo vapor sino porque lo unieron al primer sacramento religioso del bebé: el bautismo. El pasado sábado, por la tarde, la columnista de espectáculos, el empresario y Uma –hija de la ex candidata a diputada nacional y Cristian Ogro Fabbiani– junto con el peque, se acercaron hasta la iglesia Nuestra Señora de la Esperanza, en Puerto Madero, para la ceremonia. Rodeados de familiares y amistades, todos los presentes fueron testigos privilegiados de una ceremonia a pura emoción y, a veces, no pudieron evitar las lágrimas. Uno de los momentos más sensibles del encuentro fue cuando Guillermo Coppola, amigo del papi, y Fernando Wendler, amigo de la mami, fueron nombrados padrinos honoríficos. Y Leo, con la sensibilidad a flor de piel, le dedicó unas tiernas palabras a su descendiente. “Hace un año que llegaste para darnos la felicidad y enseñarnos lo que es amor. Siempre con tus sonrisas, tus miradas pícaras pero por sobre todo tu alegría. Te quiero siempre así, feliz. Te amo infinito”, compartió, ante los invitados.
Segundo capítulo. Finalizado el encuentro espiritual, los presentes, entre ellos Marcelo Polino, Yanina y Diego Latorre, se trasladaron hasta La Dolfina –uno de los restós más top de Capital Federal– para ser parte del festejo. Rodeados de exquisiteces saladas y dulces, Roque sólo compartió con los invitados hasta las diez y media de la noche, cuando se quedó dormidito. Claro, los más grandes siguieron adelante con la fiesta, que incluyó divertidos juegos capitaneados por un mago animador y baile hasta cerca de las dos de la madrugada. Eso sí, antes de conciliar el sueño, entre pasos y pasos, los papis se encargaron de que el baby soplara las velitas y estuviera en el corte de la torta preparada especialmente para la ocasión, que hizo nada más ni nada menos que la actual mujer del papá de Uma. “El nene tiene un año y mucho no entiende de una fiesta. Compartió poquito y después se quedó dormido. Fue un festejo que nos hizo bien, la pasamos súper. Roque vino a esta familia a llenarnos de luz y después del año que pasamos queríamos cerrarlo así, con festejo y con amigos. Tenemos una vida plena y hay que festejarla”, reconoció Amalia, conmovida por la dichosa etapa que atraviesa. Por más brindis.
Soplando la primera velita
Marcelo Polino estuvo presente
Retrato de familia
Guillermo Coppola, padrino de Roque
Los Latorre se sumaron al festejo
