En una nueva emisión de Por el mundo, Marley consiguió, a fuerza de buena onda y simpatía, que Diego Armando Maradona abriera las puertas de la mansión que comparte con Rocío Oliva en la ciudad de Dubai. Secundado por Mirko y Carina Zampini, el conductor le hizo una entrevista a fondo al ídolo que incluyó una recorrida por la casa y confesiones inesperadas.
El momento más emotivo se dio cuando Maradona recordó la muerte de sus padres. "A papá y a mamá se los extraña mucho. A veces me pongo a hablar con ella solo en el balcón y me imagino que todavía la tengo. Eso es lo peor que me pasó en los últimos años: perder a mamá. Es algo que no me lo esperaba. Ahora tengo un nuevo nieto, Dieguito. Por ahí Dalma mete el batacazo también…", dijo y tendió un pequeño puente con su hija mayor, con quien está enemistado tras ausentarse de su boda.
Diego también se refirió al cambio de hábitos que realizó tras dejar las drogas. “Yo me retiré cuando dejé la droga. El otro día cumplí 14 años desde que la dejé. Dejé los amigos de la noche, prefiero verlos a la tarde comiendo un asado o jugando un partido de fútbol-tenis. Cuando llegan las 10, 11 de la noche ya soy un tipo de 57 años que quiere vivir el otro día con mucha más fuerza, más ímpetu y eso me lo agradece la gente que está al lado mío", confesó.
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Diego mostró su casa y abrió su corazón.
