De la vida de Christophe Krywonis hay muy pocos datos: se sabe que nació en Francia, que tiene una hija, que está soltero y que fue jurado del excelente reality Bake Off. Pero en su visita al programa de Andy Kusnetzoff, PH, Podemos hablar, el compañero de Paula Chaves sorprendió al contar lo duro que fue su infancia por el abandono de su papá.
“Mis padres estuvieron siempre desencontrados, hablaban uno mal del otro. Mi padre nunca estaba, hasta los 18 años para mi era Dios, era el mejor y todo eso a pesar de las macanas que se mandaba y sus mentiras. Yo lo bancaba, pero una noche, en París, lo llamé para pedirle ayuda porque no tenía donde dormir y me dio la espalda”, comenzó.
"Entendí que era un pobre tipo, que era una persona que no asumió su rol de padre. Si sos papá sos papá y punto", dijo Krywonis.
“Estaba en la casa con su nueva mujer y me dio una explicación ridícula diciendo que no podía hacer nada por mi, ese día entendí que mi viejo ya no estaba, moría. A los 18 años me aleje de él y entendí quién era mi padre con tristeza pero no con bronca”, afirmó Krywoins.
Poco más de veinte años más tarde, Christophe lo vio en el sur de Francia: “Entendí que era un pobre tipo, que era una persona que no asumió su rol de padre. Si sos papá sos papá y punto y amas a tus hijos", dijo.
"¿Si lo perdoné? No lo sé porque, para perdonar, tiene que haber una disculpa primero. No me quejo para nada de lo que me pasó, con el tiempo entendí que era una experiencia diferente”, afirmó y destacó la relación con su abuela.
"Mis padres estuvieron siempre desencontrados, hablaban uno mal del otro. Mi padre nunca estaba", relató el jurado de Bake off.
“La tuve poco tiempo porque murió a mis 11 años. Pero en ese tiempo yo entendí lo que es el amor. Ella me lo enseñó todo y es por ella que yo estoy acá. Soy un agradecido a ella. Siempre fue lo mejor que me pasó en la vida”, terminó.
