Romina Uhrig no se habrá ganado la casa prefabricada como Nacho, los millones de pesos que se llevó Marcos o el viaje a Tailandia de Julieta. Pero luego de Gran Hermano, Romina se quedó con Caramelo, el perrito que entró con su hermanita Mora y logró adoptar a pesar de la fuerte campaña en su contra.
Desde hace semanas que Romi y sus hijas viven con el pequeño cachorro, de quien comparte continuamente fotos y videos sobre cómo crece y se adapta a su nueva vida en la casona de Moreno. Y luego de recibir críticas por absolutamente cualquier cosa que haga, la morocha mostró la topísima camita del can que le cayó del cielo.
“Gracias por el regalito para Caramelo”, expresó la ex diputada en sus historias de Instagram, donde subió una foto en donde se ve al perrito muy feliz arriba del mini-sillón que cotiza alto en pesos.
Según se lee en el sitio web de la marca que le mandó el canje para el hermanito de Mora, se trata de un mini sillón que “cuida su columna de impactos” y vale 22 mil pesos. Tiene patas de acero cromado brillante, con antideslizante y fino tapizado en beige de una pela que presumimos antimancha.
CARAMELO CONOCIÓ EL MAR CON ROMINA DE GRAN HERMANO
Así, Romina volvió a demostrar que el pequeño Caramelo es el más mimado de su casa y que la pasa bomba con sus hijas Mía, Felicitas y Nina, con quienes en Semana Santa viajó a conocer el mar en una escapada familiar que hicieron a la Costa Atlántica.
Desde ese paisaje de playa y sol, la ex jugadora del reality de Telefe subió fotos y videos que dan cuenta de las divertidas mini-vacaciones que se tomaron, toda una aventura para el peludito, que se sumó entusiasmado a la propuesta de juegos y risas de las nenas y su mamá humana.
