El Cementerio Las Praderas, sobre Camino de Cintura, es donde le dieron el último adiós a Brenda del Castillo y Morena Verdi, víctimas del triple femicidio de Florencio Varela. Allí se reunió una decenas de familiares y amigos que se juntaron en medio de tanto dolor para despedirlas.
Sabrina, la mamá de Brenda, destrozada se animó a enfrentar los micrófonos. Con un dolor insoportable y acompañada de sus familiares, se animó a romper el silencio para pedir nuevamente por Justicia y que se vaya hasta las últimas consecuencias, para que esta barbarie no vuelva a repetirse.
“Lo único que pido es justicia. Ellas no tenían la culpa de nada. Nosotros no sabemos qué es lo que pasó. Veo cosas que dicen de mi hija que no son ciertas”, expuso la madre de Brenda, en un estado de conmoción por lo que le toca vivir.
Mientras que la investigación continúa avanzando, y en las próximas horas y días se vendrán reuniones con la familia, para comenzar a dilucidar en qué contexto se dio este femicidio, envuelto bajo una enorme sospecha de una ajuste de cuentas narcos, hoy fue su despedida.
DESAGARRADOR DESPEDIDA A LAS VÍCTIMAS DEL FEMICIDIO EN FLORENCIO VARELA
“No estoy satisfecha con lo que se hizo. Agarrabas dos perros y empezabas a rastrillar, era fácil. Pagamos los impuestos para que la policía accione como corresponde”, lanzó Sabrina, molesta por cómo se llevó adelante la búsqueda.
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Y al cierre de su comentario, agregó: “¿Cómo van decir que eran viudas negras? Si no tengo ni respaldo. Mis paredes están sin pintar y ahora no tengo ni para comprar cigarrillos. ¿De qué hablan? Voy a marchar y cortar las calles todos los días, pacíficamente, hasta que me traigan la cabeza del responsable. Del jefe, del hijo y del espíritu santo”.
