El miércoles a la noche, Diego Brancatelli y Ceferino Beato protagonizaron una escandalosa pelea en el aire de Intratables. Con graves acusaciones de un lado y del otro, que incluyeron palabras muy fuertes y una invitación a resolverlo a los puños. Un episodio olvidable, de esos que no deberían suceder en la televisión.
“Yo tengo el culo limpio, no como vos que cobrás $145.000 del Estado. Sos un ñoqui y un llorón”, lanzó Beato con un lenguaje muy poco profesional. Claro que el periodista deportivo no respondió con altura, sino que espetó: “Me parece que es un momento muy desagradable y una falta de respeto. Si querés lo arreglamos afuera”. Todo esto surgió por la labor como funcionario del Municipio de Pilar que desarrolla Brancatelli.
Es cierto que Ceferino no aportó ninguna prueba que avale sus dichos, así como tampoco es una actividad incompatible la que lleva a cabo el cronista en la ciudad en la que reside. No obstante, el momento soez quedó retratado delante de las cámaras. Esto inició conjeturas de qué decisión tomará la producción del ciclo de América.
En medio de todo este entuerto, Brancatelli se explayó públicamente hace unos minutos, a través de un video que posteó en su cuenta de Twitter. Diego documentó un gesto muy loable, en primera instancia exhibió su recibo de sueldo, en el que se ve un monto de 60 mil pesos y después se mostró comprando una cantidad enorme de alimentos para donar el valor equitativo a un salario.
El comunicador dijo en el video: “Acá está mi recibo de sueldo, porque se dijeron muchas mentiras. Acá se ve que ganó 60 mil pesos, no 145 mil, ni 200 mil. Decidí hacer lo siguiente: comprar mercadería y entregar a tres clubes de acá de Pilar”.
En este producto audiovisual se percibe como el periodista eligió con sus manos los alimentos, los cargó en su auto y lo llevó personalmente a tres instituciones deportivas. Un buen gesto, tras un comportamiento errático, que amerita que se imite.
