El 1 de octubre, Morena Rial llegó a la cárcel de Magdalena y su llegada significó toda una revolución para las reclusas de la Unidad 51. Sin embargo, lejos de fascinarse con la novedad del arribo de la mediática hija de Jorge Rial, las presas de inmediato se plantaron con desconfianza y, también, bronca.
Lo cierto es que pasaron unos días desde que la influencer está alojada en el penal de mujeres y el clima no mejora sino todo lo contrario. Es que, según las presas, Morena es una suerte de presa “VIP” con beneficios impensados para ellas, que no son hijas de periodistas famosos.
“Hay mucho enojo con Morena. Las internas están enojadas porque sentirían que ella tiene ciertos privilegios”, señaló Marcela Tauro en Intrusos (América), al repasar la situación procesal de la joven de 26 años que desde que entró sigue aislada en la zona de “buzones”.
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¿Qué indigna a las mujeres? Que Morena no se mezcla con ellas y que aún no pudieron verla porque está en otro sector de la cárcel. “Dicen que el lugar está tapado, que está en otro lado”, indicó Marcela sobre el malestar que crece en el pabellón.
LA BRONCA QUE CRECE CONTRA MORENA RIAL EN LA CÁRCEL DE MUJERES
Pero esta situación especial de Morena no es la única que molesta al resto de las reclusas. Además, los ánimos de las presas estarían caldeados porque en la Unidad 51 ya corrió el rumor de que el abogado de la hija de Rial ya pidió la prisión domiciliaria por ser mamá de un bebé de un año.
“La prisión domiciliaria sería inminente. Tiene un bebé muy pequeño, y ese sería el principal motivo por el cual se solicita el beneficio”, comentó Rodrigo Lussich sobre la situación de Morena, la misma de muchas mujeres que están encarceladas como ella.
