Un llamado puso su vida de cabeza. Ni bien le propusieron protagonizar Mi hermano es un clon, Flor Vigna aceptó. Nunca pensó que se ganaría la oportunidad de actuar. Compartiría elenco con Nicolás Cabré. Nunca habían trabajado juntos. Lamentablemente, ni bien comenzó la tira, un escándalo amenazó con que perdiera el equilibrio.
La polémica estalló cuando Flor compartió a través de sus redes sociales la imagen de una escena. Se la podía ver abrazada a Nicolás, en una cama. ¡Pura ficción! Sin embargo, la novia de él, Laurita Fernández, le pidió que la eliminara. Además, contó que Flor habría tenido actitudes poco serias con Nicolás. Eso sí, no quiso entrar en detalles.
Claramente, Vigna se defendió. Explicó que está muy enamorada de su novio y que jamás intentó coquetear con su compañero. Obviamente, las grabaciones se volvieron más complicadas. Ahora, que la tira terminó, la joven rompió el silencio y contó cómo fueron los últimos días de grabación.
"Profesional es la palabra. Terminó muy seca en lo personal. Pero algo tengo que aprender de eso. Uno no se puede llevar bien con todo el mundo. A mi pasa que una persona me dice en la calle 'boluda, cruzá bien', y yo ya me quedo mal. Eso no me puede pasar. Tengo que aprender a limpiar", expresó Vigna en diálogo con Los ángeles de la mañana y agregó: "Era mi primer protagónico, con él pasaba mi historia principal... Pero bueno, está bueno aprender a laburar así, encontrás otras herramientas. Es parte del oficio. ¿Si nos despedimos? Teníamos dos unidades, yo estaba grabando en la otra y él se fue. Pero hubo un brindis con todo el elenco... El elenco era muy copado".
¡Qué incómodo!
Por Agustina Rinaldi
Flor no volvería a trabajar con Nicolás.
