Multifacética si las hay, a pesar de ser en su momento una de las modelos más importantes de nuestro país, Julieta Prandi decidió abrir nuevos caminos a fin de generar ingresos o darse el gusto de hacer cosas que le gustaban. Por eso, más allá de escribir y conducir, en 2014 incursionó en el rubro gastronómico.
Antes de que salga a la luz la interna con su ex marido y padre de sus hijos, y cuando aún estaba casada con Claudio Contardi, la actual pareja de Emanuel Ortega puso un local de comidas rápidas en un topisimo parador de Pinamar donde se especializaban en panqueques tanto salados como dulces.
Pero, al parecer, ese hobby por la cocina Julieta ya lo habría dejado atrás y, por el contrario, ella misma asegura que lejos está de disfrutar esa tarea. Dicha confesión de Prandi se dio al aire de Sarasa, el programa que conduce en La 100 junto a Mariano Peluffo.
“¿Cómo te llevás vos con la comida? ¿Sos de cocinar? ¿Tenés un caballito de batalla?”, indagó La gunda Claudia Fontán, que también integra la mesa del ciclo radial abriendo debate. A lo que la modelo se sinceró: “Tengo. Me sale muy bien, por ejemplo, el tiramisú”.
SE CANSO DE LA COCINA
“Ponele, es una de las cosas que me salen muy bien. Pero estoy peleada con la cocina. Hace un tiempo que me enojé. En un momento era como mi obligación. ¡Y detesto que sea mi obligación la cocina! Entonces, me enoja”, confesó Prandi dejando en claro que no es de los quehaceres de la casa favoritos.
Fue entonces que su compañero Peluffo, tras hablar de su caso y a fin de cargarla por ello, lanzó: “De hecho, si le querés arruinar el día le podés preguntar qué comemos hoy”. Por lo que Julieta retomó: “Yo necesito gente que me cocine. Detesto cocinar ya ahora”.