Gran Hermano avanza al ritmo de una topadora, que arrasa con todo en su camino, principalmente porque se mantiene como el mayor éxito de los últimos años de la televisión argentina. Dentro de sus intrincadas situaciones del encierro, Julieta Poggio sintió la necesidad de descargarse.
La modelo confesó, en un diálogo en la habitación con Daniela, que le solicitó a la producción una sesión con el psicólogo del reality, Juan Rodríguez Mentasti. Un dato que grafica el nivel de estrés, de angustia, de necesidad de expresar sus sentimientos más íntimos.
A raíz de los sucesos de las últimas horas, en los que Disney se mostró compungida y totalmente angustiada por la lejanía con su novio, sobre quien aseguró que extraña a mares, muchos usuarios especularon con que el motivo se centró en ese aspecto de su semblante actual.
En definitiva, Julieta se animó a revelarle a Daniela un ápice de lo que aconteció en esa sesión privada con el especialista en salud mental. En el fragmento que se viralizó por las redes, la de Moreno le preguntó: “¿Te dejó confusa la charla con Juan?”.
Así, Poggio se aventuró a revelar el contenido y sobre todo la secuela de ese momento de intimidad con el psicólogo: “Estuvo buena. Hay una sola cosa que nunca la pude hablar con nadie, y con él sí”. Una frase que muchos fanáticos relacionaron con la química que brota con Marcos y que probablemente se refería a esa conexión y a lo que le sucede con el salteño.
Lo concreto es que Julieta no aguantó más, su cavilaciones la motorizaron a recurrir a un profesional, para tratar de manejar sus emociones, que son múltiples, dado que abarcan los síntomas de un aislamiento prolongado, los conflictos naturales de las relaciones interpersonales y todo lo que padeció con la “traición” que ejecutó Coti con esa espontánea con la que rompió el pacto de las mujeres.
Asimismo, Poggio también mostró cierta desconfianza con su amiga Daniela, dado que reflexionó con Romina con una concepción picante: “Para mí que cuando Thiago le pregunta, Dani se hace la lady. Duermen juntos igual, ¿qué cambia? Por eso, no entiendo. Porque si no, no dormirían juntos”.
