Nicolás Behringer emocionó a todos en su paso por La Voz Argentina y no fue solo por su voz. El joven contó una historia que conmovió al jurado y al público. “Hace unos 5 o 6 años falleció mi viejo, que era el único vínculo cercano”, reveló.
A partir de esa pérdida, su vida cambió por completo. “En el momento en que eso pasó me hice tutor de ella”, explicó, en referencia a su hermana. Desde entonces, quedaron solos. “Vivimos por nuestra cuenta, somos ella y yo nomás. Somos el círculo completo”, relató.
La música fue su refugio y también su forma de ganarse la vida. Nicolás canta en la calle y así logró sostenerse junto a su hermana. Cuando Nico Occhiato le aseguró “te va a cambiar la vida lo que está a punto de pasar”, él respondió esperanzado: “Ojalá que sí”.
Su historia no empezó ni terminó en el escenario, pero encontró allí un lugar para sanar. “Soy un ser humano que constantemente está tratando de aprender de las cosas que pasan en la vida”, expresó. Cada palabra suya mostró la fuerza de alguien que creció de golpe.
LAS HISTORIAS DE VIDA EN LA VOZ ARGENTINA
A pesar de todo lo vivido, Nicolás habló sin enojo ni rencor. Dijo que no puede marcar un momento exacto porque sintió que “transité una cantidad de cosas en una poca cantidad de años que fueron muchas vidas al mismo tiempo”. Su relato dejó a todos en silencio.
La historia de Nicolás no es la primera de la temporada que emociona al público. De hecho, hubo una participante que confesó que se salvó del cáncer y la música fue su gran motor. La joven se mostró súper emocionada y agradecida por lo que podía contar.
