Acaba de encenderse un explosivo en las entrañas de Telefe, que atraviesa un presente convulsionado con la venta del canal y una oleada de renuncias. Incluso, se dispersó en la atmósfera la sensación de posibles nuevas salidas de figuras, a raíz de este cambio de propietarios.
En todo ese contexto, en A la tarde iluminaron una conflictividad sorpresiva en La Peña de Morfi, más precisamente un discrepancias entre los conductores Diego Leuco y Lizy Tagliani, quienes comparten, hace dos años, la animación del histórico ciclo creado por Gerardo Rozín.
La información vertida en el programa de América se refiere a una supuesta circunstancia sin retorno. Al menos eso se infirió de los datos que exteriorizó Cora Debarbieri. “Habría disgustos y uno de los conductores le estaría pidiendo a la producción que el otro ya no siga”, soltó.
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En la continuidad del ciclo de Karina Mazzocco relataron que la relación entre los conductores se habría quebrado, que mantienen una especie de pacto de no agresión en el plano público, pero que puertas adentro no reina la amabilidad, ni la cordialidad.
ASEGURAN QUE HAY UNA PELEA ENTRE LIZY TAGLIANI Y DIEGO LEUCO
Por eso buscaron la palabra de Lizy, quien habló con los micrófonos de América y deslizó algunas cuestiones que alimentan la versión de una falta de conectividad con Leuco. “Creo que sigo, nadie me dijo nada. En noviembre hablaremos de eso”, manifestó.
Ante la consulta sobre si podría encargarse de conducir en soledad, Tagliani transmitió una frase que quedó rebotando en la atmósfera. “No sé lo que hará Diego, o lo que tenga que hacer, porque son contratos por separado. No tengo idea si sigue, no soy Leuco”, asestó.

