Los últimos días fueron bastante duros para los participantes de Gran Hermano. Tanto Zoe como Furia incumplieron con las reglas del juego, por ese motivo, la producción se puso firme, decidió aplicar el reglamento y sancionó a las competidoras.
Ambas no siguieron el protocolo establecido desde el primer día, por esa razón, deberán afrontar las consecuencias de su mal comportamiento. Si bien cada una hizo algo diferente, el castigo impuesto por Big es bastante parecido, salvo una diferencia.
La primera sanción fue para Zoe: "Ustedes saben que el Congelados tiene reglas específicas, que deben ser respetadas no solo por ustedes, sino también por los seres queridos. Así como cada participante está obligado a guardar silencio, los familiares tienen prohibidos decirles información que atenten contra el espíritu del juego".
Y agregó: "La mamá de Zoe desobedeció esta norma dando información. Debido a este inconveniente, Zoe no podrá jugar la siguiente prueba por el liderazgo. Tampoco tendrás la posibilidad de ser salvada por el líder de la semana, en caso de que seas nominada".
LA SANCIÓN A FURIA
Por el lado de Furia, el inconveniente se dio luego de que fuera a pedir cigarrillos. Gran Hermano se los negó, por lo que la participante se declaró en rebeldía y le sacó las pilas al micrófono. Además, no acató el llamado al confesionario de Big.
"Lo que hiciste significa una trasgresión gravísima. Debido a estas acciones, voy a sancionarte. Ya estás nominada, no podrás jugar el martes la prueba del liderazgo, No podás nominar y tampoco podrás ser salvada por el líder de la semana", expresaron sobre la sanción a Juliana Scaglione.
