En consonancia con su propia tradición, que implica un traslado tempranera a las tierras esteñas, Valeria Mazza disfruta de un periodo de relajación, de absoluto esparcimiento y de tranquilidad con toda su familia en la siempre codiciada ciudad de Punta del Este.
La ex top model organizó todo a mediados de diciembre, después de conducir la gala de los Martín Fierro de la Moda, y se mudó con toda su tropa a la casa que tiene en ese punto bellísimo del país vecino de Uruguay. Por eso, la blonda transita por una atmósfera de distensión.
Paparazzi encontró a Valeria en una playa alejada, de poco movimiento turístico, a la que acudió con su marido Alejandro Gravier, sus hijos Taína, Benicio y Tiziano e incluso su propia madre Mónica Ferreira. Entre la arena cálida, las piedras y el mar se acomodaron para tomar sol.
La lente de este medio logró retratar diversos momentos de la salida familiar, especialmente en el lenguaje corporal de relajación de la famosa, que se predispuso a captar los rayos del sol para broncear su piel, para lo cual tomó los recaudos de aplicarse un factor alto de protector solar.
VALERIA MAZZA DISFRUTA DE LAS VACACIONES EN PUNTA DEL ESTE
Claro que sus herederos, que transitan por la juventud con toda la energía que conlleva, apostaron por sumergirse en las aguas de ese mar, para chapotear, jugar entre ellos y apaciguar las temperaturas de este enero soleado en la hermosa Punta del Este.
En definitiva, Valeria celebró las fiestas de Navidad y Año Nuevo en un clima maravilloso, en ese lugar en el mundo que siempre elige y al que se acerca en cada oportunidad que su agenda se lo permite. Y ahí estuvo Paparazzi para dilucidar los hábitos en las tardes de playa.
