Marixa Balli es una enciclopedia viviente de la farándula argentina. A los 54 años, la cantante, bailarina, modelo, conductora, empresaria textil y ahora angelita de LAM no sólo las hizo todas a lo largo de su carrera: también guarda buena memoria y tiene una lengua muy picante con la que analiza el presente y recuerda el pasado. Así, ahora despellejó a Julián Weich, quien era su amigo hasta que "se agrandó".
En el programa que conduce Angel de Brito, Marixa se fue como treinta años para atrás para contar que "Con Julián Weich empezamos prácticamente juntos, así que nos hicimos muy amigos. Pero nada de amigos con derecho a roce. No, yo era amiga de él y de su mujer, su mujer en ese momento, que era divina. Nos llevábamos bárbaro".
"Me acuerdo de todo. Por ejemplo, que él tenía un tío que era el que importaba unos relojes y unos anteojos que eran buenísimos. Entonces con mi mente comercial le dije "por qué no vendemos en los canales de televisión esos relojes que trae tu tío, que él nos puede hacer un buen precio. Lo hicimos y así sacamos una diferencia a lo que ganábamos en la tele", agregó la "Cachaca", quien hace poco acusó de mujeriego a Marcelo Tinelli, con quien tuvo un affaire.
"Eramos muy muy amigos. Intimos. Ellos vivían en un departamento de la zona de Pacífico, en Santa Fe y Juan B Justo. Ahí nos juntábamos con los chicos de la Banda del Golden Rocket. Julián, Diego Torres, Araceli González, Adrián Suar. Eran asaltos esas reuniones. Cada uno decía lo que iba a llevar. Las gaseosas, algo para comer. Ellos tuvieron hijos y yo les hacía regalos a los nenes. Esa era la confianza que teníamos", aseguró luego.
MARIXA BALLI RECORDO CON DOLOR LA TRAICION DE JULIAN WEICH CUANDO ERAN GRANDES AMIGOS
"Me acuerdo que una vez fui a trabajar a Perú y le traje un andador para los chicos que acá no había. Yo los quería mucho. Pero de repente hizo "El agujerito sin fin", la pegó y se agrandó re feo. Pero mal, mal. Cambió totalmente. Pasó a ser otra persona porque tenía un sponsor muy importante, una jueguetería muy grande, que le ponía mucho dinero. Se compraron una casa espectacular por acá cerca y ya nada fue lo mismo", contó Marixa.
"Una vez estábamos en un evento -siguió la cantante- y nos pidieron una foto juntos. Y dijo "No, yo con Marixa no puedo sacarme fotos porque ahora mi público son los chicos. Me cayó muy mal eso. Después fui a la casa a un cumpleaños de él y llegué con Diego Torres. Los dos le llevamos el CD que habíamos grabado, nos recibió y dijo "ay...esto de tener amigos cantantes..." y estaban los hijos con sus autos a motor, entonces le pregunté por el andador que les había traído y me dijo "¿No ves que tienen autos a motor?". Lo había tirado al basurero. Estaba agrandado mal".
