La situación judicial de Morena Rial vuelve a instalarse en el centro de la agenda mediática y esta vez no por su pericia psicológica que podría cambiarlo todo. Mientras permanece detenida, en A la Barbarossa revelaron cuáles son los avances más importantes de la causa y qué podría definirse en los próximos días.
Según explicaron Pía Shaw y Paulo Kablan, la fiscalía ya habría presentado un pedido de elevación a juicio oral que podría cambiar por completo el panorama de la hija de Jorge Rial. De acuerdo con la información que dieron los panelistas, Morena continúa imputada dentro del marco de una supuesta banda conformada por cuatro jóvenes, mientras que una quinta integrante permanece prófuga.
Hasta ahora, el expediente incluía un hecho inicial por el cual habían sido detenidos, pero la investigación avanzó con dos episodios más: uno ocurrido también en San Isidro y un tercero en la Zona Oeste del Gran Buenos Aires, donde la víctima denunció el robo de una suma importante de dólares y varios teléfonos celulares.
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Kablan detalló que este último caso tendría como damnificado a un hombre que se encontraba de vacaciones en la costa, lo que habría dejado su vivienda temporalmente vacía. Según los investigadores, los hechos tendrían un patrón repetido: ingresar a casas sin moradores y llevarse objetos de valor. Ese habría sido el denominador común en los tres episodios que ahora figuran dentro del pedido de elevación a juicio.
Pero lo que más llamó la atención en el programa fue la existencia de un documento de 29 páginas presentado por la fiscalía, donde se describen los hechos investigados y se incorporan elementos clave para sostener la acusación. Dentro de ese escrito figuraría, según Shaw y Kablan, una confesión parcial de Morena Rial sobre su presunta participación en uno de los episodios.
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Esa admisión —aunque no abarcaría la totalidad de los hechos— podría ser utilizada por la fiscalía para reforzar su postura frente a la jueza. Ahora, la decisión final quedó en manos de la jueza de Garantías, quien deberá determinar si la causa pasa o no a la instancia de debate oral.
Los panelistas subrayaron que, de comprobarse responsabilidad dentro del marco legal, las penas previstas para este tipo de delitos pueden ir de 3 a 10 años de prisión. Es decir, el escenario no es menor y podría marcar un antes y un después en la vida de la hija del exconductor de Intrusos.
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Mientras tanto, el expediente continúa en pleno movimiento. La elevación a juicio, la confesión parcial y los detalles de los tres hechos investigados conforman un combo que pone aún más tensión en el caso. Si la jueza avala el pedido de la fiscalía, Morena Rial podría enfrentar su momento judicial más complejo hasta ahora.
Por eso, en el programa advirtieron que los próximos días serán decisivos para saber cuál será su destino inmediato. Por el momento, no hay resolución firme, pero sí un clima creciente de expectativa. Y si el escenario termina en juicio oral y se confirma la participación que se investiga, Morena podría quedar frente a una pena que llegaría hasta los 10 años de prisión.
