"Pequeño J", el temible y sanguinario traficante de drogas acusado de ser el "autor intelectual" del triple femicidio de Florencio Varela, habló tras ser detenido ayer en cercanías de Lima, la Capital de Perú. En un contacto con la prensa local cuando era trasladado de una dependencia a otra, el maleante se desligó de los asesinatos y pidió "encontrar al verdadero culpable" porque "yo no tengo nada que ver" con el aberrante suceso.
Considerado "el rey de las drogas" de la zona sur de la ciudad de Buenos Aires (villas 1-11-14 en el Bajo Flores y 21-24 y Zabaleta en el fondo de Barracas, Parque Patricios y Pompeya), "Pequeño J" fue arrestado en una zona conocida como "Pucusana", en las cercanías de Lima, en el interior de un camión que transportaba pescado. Se supone que escapó de la Argentina poco después de ordenar y presenciar los crímenes de las jóvenes Brenda, Morena y Lara, las dos primeras de 20 años y la última de apenas 15, y que pretendía acceder a la periferia de la capital de Perú para esconderse en un "aguantadero" prácticamente inaccesible para la policía de ese país.
Con el rostro y el peinado con flequillo idénticos a los que mostraban las fotos que se difundieron mientras estaba prófugo, "Pequeño J" llevaba puesta una especie de "pechera" naranja con la inscripción "detenido" y antes de que subiera a una camioneta fue abordado por un grupo de periodistas de la televisión peruana, que le acercaron sus micrófonos para que dijera sus primeras palabras en condición de arrestado. "¿Qué tienes para decir frente a esto que sucedió?" lo consultaron con premura.
"Esto que pasó es un espanto" dijo el "capo mafia", cuyo verdadero nombre es Tony Janzen Valverde Victoriano. No se lo veía nervioso ni preocupado. Más bien parecía tranquilo. Hasta parecía dibujársele un hilo de sonrisa. "No tengo nada que ver" se le escuchó decir por lo bajo. Además, mientras miraba fijo a los periodistas con los mismos ojos con los que supuestamente vio como torturaban y mataban a las chicas, alcanzó a pedir que "encuentren a los culpables".
QUE DIJO "PEQUEÑO J" DEL TRIPLE FEMICIDIO DE FLORENCIO VARELA DESPUES DE SER DETENIDO EN PERU
Tras una intensa búsqueda tanto en la Argentina como en Perú, su país de origen, "Pequeño J", de apenas 20 años y una extensa carrera delictiva a pesar de su juventud, fue apresado pocas horas después de que cayera, también en Lima, su cómplice principal Matías Ozorio, de 28, en una redada que parece haber dado un paso fundamental para esclarecer el triple femicidio que sacudió a la Argentina la semana pasada, primero cuando no se podía dar con el paradero de las chicas y luego cuando se encontraron sus cuerpos en un pozo ciego de una casa de Florencio Varela.
Desde ese primer momento, los trascendidos indicaron que Brenda, Morena y Lara, o al menos alguna de ellas, "engañaron" al jefe narco luego identificado como "Pequeño J", lo "durmieron" y le quitaron dinero (se habló de 70.000 dólares) y drogas (se rumoreó de una cantidad importante de cocaína y otra sustancia llamada "Tusi"), y que para vengarse y "aleccionar" a otros integrantes de la organización las muchachas fueron engañadas y con el pretexto de invitarlas a una fiesta las subieron a un auto en la rotonda de La Tablada. De allí las llevaron a la casa de Florencio Varela, donde fueron torturadas y luego asesinadas brutalmente.
