Hay momentos que definen etapas, y a veces, el primer sueldo es uno de ellos. Eso les pasó a Sabrina Rojas, que se animó a contar al aire de Pasó en América cómo fue ese primer gran ingreso económico que tuvo en los inicios de su carrera y en qué lo gastó. Más allá de la sorpresa y las risas que generó, su testimonio también invitó a reflexionar.
Todo sucedió luego de ver un tape de Guido Kaczka que explicaba en qué había invertido su primer sueldo de actor, recordando que el hoy también conductor arrancó de muy chico a trabajar. Fue entonces cuando, de regreso al piso de América, cada uno comenzó a contar su propia experiencia. Llegado el momento, Sabrina tomó la palabra.
“Mi primer sueldo importante fue con una publicidad que hice para un desodorante, me hice las lolas, me alcanzaba justo”, lanzó Sabrina entre risas. Se trataba de una campaña que hizo para el desodorante Axe, que era su primer trabajo fuerte. Pero lejos de quedarse en la anécdota, la conductora fue más allá y dejó una frase que encendió el debate.
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“Una vez que salí de ahí me fui a Avenida Cabildo a comprarme strapless, porque ya estaban sostenidas y me iba al boliche feliz. Qué estupidez, ¿cómo una boludez nos pone seguras? Para mí era un lujo porque yo pagaba el alquiler”, explicó Rojas, analizando la situación y recordando cómo se daba todo en aquellos años.
NATALIE WEBER Y AILÉN BECHARA REVELARON QUÉ HICIERON CON SUS PRIMEROS SUELDOS
Por su parte, Natalie Weber no dudó en compartir su propia experiencia también hablando del momento en el que decidió operarse. “¿No te pasaba que cuando te operaste no querías usar corpiño para que se te noten los timbres? Yo como antes me ponía relleno, cuando me operé quería mostrar que eran de verdad”, confesó sin vueltas.
Quien también sumó su aporte fue Ailén Bechara. Y, como Sabrina, reveló que su primer sueldo terminó en el quirófano: “Yo con mi primer sueldo de promotora también me operé y me salieron 5 mil pesos mis primeras lolas. Después, cuando trabajé con Guido me acuerdo que gané 800 pesos y me compré mi primer sommier. Pasé de una cucheta horrible e incómoda al sommier”.
La ex de Luciano Castro no dudó en recordar no solo sus primeros trabajos en el mundo artístico sino también su primera experiencia en el quirófano. Una anécdota divertida en un principio pero que también la invitó a reflexionar sobre los cambios.
