Las últimas dos incorporaciones para el Bailando por un sueño confirmaron una primera lectura de las redes sociales: se trata, a simple vista, de la edición con menos "figuras de renombre" de todas las que se llevaron adelante hasta el momento. Los uruguayos Maxi de La Cruz y Fernanda Sosa se sumaron al "staff" generando una pregunta directa de la mayoría de los usuarios: "¿Quiénes son?"
De la Cruz es un humorista de larga y rica trayectoria teatral y televisiva que hasta ha ganado premios por sus cualidades artísticas pero no ha logrado todavía volverse una figura fácilmente identificable para el gran público. Es un talentoso, indudablemente, y es probable que se destaque en la pista por su personalidad, por su carisma y por sus agallas, pero arranca sin ese respaldo del reconocimiento de las grandes masas.
Fernanda Sosa ni siquiera ha tenido algún desempeño en nuestro país y su nombre no ha estado jamás circulando en los programas vinculados al ambiente farandulero. El anuncio de su llegada al "boliche" de Marcelo Tinelli tomó por sorpresa incluso a aquellos periodistas que suelen ser amigables con los productos del conductor nacido en Bolívar. Ninguno sabía ni podía explicar quién era ella. Se sabe, ahora, que es una modelo e influencer que ya avisó que viene para llevarse todo por delante.
Lejos quedaron los tiempos en los que iban a bailar figuras internacionales de la talla de Mike Tyson, Evander Holyfield o Lorenzo Lamas, o destacadas celebridades locales como Carmen Barbieri, Moria Casán, Dady Brieva, Pampita, Nicole Neumann, Hernán Piquín o Maximiliano Guerra. Tinelli siempre fue un as en el arte de descubrir "tapados" y transformarlos en figuras (acaso Ricardo Fort y La Mole Moli sean los mejores ejemplos) pero esta vez parece demasiado arriesgada su apuesta a "personajes que pueden dar la sorpresa".
SE VIENE EL BAILANDO Y HAY ALERTA PORQUE HAY POCAS FIGURAS DE PRIMER NIVEL ENTRE LOS PARTICIPANTES
De la Cruz y Fernanda Sosa no son los únicos "poco conocidos" que saldrán a mover las caderas y enfrentar los malvados comentarios del jurado. Otros nombres que generaron desconcierto entre las muchedumbres fueron Juli Castro (es la hija de Momi Giardina, una bailarina histórica del programa a quien vincularon sentimentalmente con Tinelli, quien tiene 20 años y es influencer) y Anabel Sánchez: se trata de una muchacha de San Francisco Solano que saltó a la fama hace un puñado de semanas cuando mandó una filmación casera para ser modelo de la revista Vogue y ese video se viralizó. Su ingreso fue muy celebrado y seguramente sea un acto de justicia, pero su nombre todavía no linkea directamente con su figura.
El resto de los convocados se divide entre recientes jugadores de Gran Hermano y viejos conocidos de los ciclos de Tinelli. Del realitie de Telefe llegaron Alfa, Coti, El Cone y Tomás Holder, mientras que "el clan Tinelli" aportará a Cande Tinelli, al Tirri, A Lourdes Sánchez y a Coki Ramírez. En el medio de todos ellos se mezclan el periodista Guido Záffora, las modelos Romina Malaspina y Cami Homs, y el estilista Kennis Palacios, quien puede volverse un personaje interesante y picante si se decide a contar los secretos que conoce de todas las famosas. Evidentemente, Tinelli está metido en un baile...
