Mirtha Legrand, ícono indiscutido de la televisión argentina, se ve envuelta en un complicado conflicto legal tras recibir una millonaria demanda por parte de su histórico chofer, Marcelo Campos. El hombre trabajó con la conductora durante 30 años, encargándose tanto de tareas personales como de su asistencia en prensa y eventos.
La denuncia, radicada el pasado viernes, apunta a un despido ilegal y a una supuesta registración fraudulenta. Según Campos, durante ocho años trabajó sin estar correctamente registrado, lo que derivó en un reclamo económico por 158 millones de pesos.
El periodista Luis Bremer detalló en Desayuno Americano que el reclamo surgió luego de que se realizara una conciliación obligatoria, que no llegó a buen puerto debido a la falta de acuerdo por parte de los apoderados de Mirtha.
Con esto, el caso avanza a juicio y marca la primera vez en años que la conductora enfrenta un conflicto legal de esta magnitud. La defensa de la Chiqui sostiene que Campos estaba registrado en otro gremio, ya que el gremio de choferes se creó después del inicio de la relación laboral.
LA DEMANDA DE
Sin embargo, los abogados del demandante insisten en que, aun así, se debió haber realizado el cambio de inmediato, cuestión que no ocurrió según su versión. El reclamo económico se centra en la diferencia entre el sueldo que Campos percibía y lo que le correspondía.
Según la demanda, recibía $700.000 por mes, cuando debería haber cobrado $2.000.000. Esta cifra millonaria pone de relieve la importancia de la correcta registración laboral y marca un episodio mediático que promete generar polémica en los próximos meses.
El conflicto legal entre Mirtha Legrand y su ex chofer no solo toca temas económicos, sino también la reputación y la gestión profesional de la diva. Campos, además de conducir y asistir en la vida diaria de la conductora, llevaba adelante tareas relacionadas con su imagen pública.
Por el momento, el juicio aún no tiene fecha de inicio, pero el impacto de la denuncia ya generó revuelo en los medios y redes sociales. Esta situación marca un capítulo inédito en la trayectoria de Mirtha Legrand, quien a sus 97 años continúa siendo una figura central, aunque ahora enfrentando un desafío judicial que podría ser histórico en su carrera.
