Aaron Carter supo ser una de las estrellas adolescentes de los 90 cuando se dio a conocer gracias a la fama de su hermano, Nick Carter. Hoy está muy lejos de ser ese niño inocente que cantaba y bailaba con su lacia cabellera dorada.
El artista tiene una batalla intrafamiliar contra sus hermanos, Nick y Angel, su gemela que parece no tener límites. Aaron fue ingresado en una clínica para tratar su estado de salud mental, y ha reconocido sufrir serios trastornos. Pero el artista ha llevado a sus familiares a la corte y la justicia no ha fallado a su favor.
A pesar de la sentencia, el más joven de los Carter ha decidido hacer pública una información muy sensible que está relacionada a unos supuestos abusos sexuales y violaciones por parte de Nick.
Aaron dio a conocer esta información luego de perder el juicio contra sus hermanos, celebrado ayer en la corte de Los Ángeles, en el que el juez también dictaminó que Aaron no podrá comprar armas ni tampoco tener licencia para su uso.
Además, concedió el pedido de una orden de alejamiento hacia sus hermanos, Angel y Nick Carter, de un año de duración. Nada más salir del juzgado, publicó un tuit en el que decía “Hoy he perdido mi caso en los juzgados... lo he perdido todo. Pero tengo que superarlo ya”. Mostrandose claramente muy irritado por el fallo.
“Estoy devastado por lo que he presenciado hoy en el juzgado. Mi hermana ha mentido una y otra vez solo para arrebatarme el derecho que garantiza la Segunda Enmienda (el derecho del pueblo estadounidense a poseer y portar armas) y lo ha hecho en nombre de mi hermano para evitar que siga hablando de cómo violó y agredió sexualmente a múltiples mujeres”, disparó el cantante.
También publicó una foto en su cuenta de Instagram con una joven que asegura es una de las victimas de su hermano “Cumpliré la sentencia del juez, pero nunca dejaré de hablar en defensa de las víctimas como Melissa Schuman. Me entristece ver en lo que se ha convertido mi familia y lo que me han hecho a mí. Vuestras mentiras me han roto el corazón”
