Luego de un año de expresarse con vehemencia desde su programa contra todo lo que considera que es “una locura” y de provocar con sus posturas muchas veces polémicas, Viviana Canosa se entregó con todo a las vacaciones, al descanso y al placer.
Y en esta vida de hedonismo puro que tanto disfruta, Vivi dejó entre paréntesis (sólo por un rato) los cuestionamientos y empezó a explotar en sus redes su faceta más sensual y jugada, con fotos y poses que dejan entrever su belleza y actitud.
Así, día a día, la conductora de A24 sorprende a sus seguidores desde sus historias de Instagram con nuevos ángulos de su cuerpo con poca ropa, que luego guarda en “Destacadas”, para que nadie se pierda de ver su sexy book de selfies veraniegas.
Entre las últimas imágenes que subió durante sus semanas de relax, Canosa lució un tatuaje que, hasta ahora, nadie le conocía: el nombre de la hija que tuvo con Sebastián Borensztein, Martina, grabado en tinta negra en el costado de uno de sus pies, que decora con una tobillera muy estilo hippie chic.
Pies sobre la mesa, botella de bebida que se adivina espirituosa, la periodista, que en estos días manifestó su apoyo a Novak Djokovic ante la decisión de no vacunarse y se peleó con su colega Luis Novaresio por ese tema, se animó a lucir su escote prominente, con un liviano vestido blanco con mostacillas.
Pero no todo es relax, música chill y beboteo en la vida de la conductora que se anota en todas las polémicas, porque en medio de esas publicaciones “de verano”, Viviana anunció, fiel a su estilo: “Regreso muy pronto a la tele. Nos necesitamos… ¡los necesito! Esto ya es una locura total”. El descanso le sienta mejor.
