La etapa que atravesamos es especial en todo sentido, incluso para Any Ventura (70). Despues de dos matrimonios y con tres hijos –Federico, Florencia y Micaela-, la panelista de Bendita TV vive un romance hace cinco años con Fernando Feinsiber.
Defensora de no mostrar a su pareja en la televisión, esta vez no pudo escapar. En convivencia “forzada” por la cuarentena –hasta ahora solo compartían los fines de semana- la periodista y su galan pasan los días y las noches bajo el mismo techo, en la casa de ella.
Y por primera vez se animo a exponerlo en el programa de Beto Casella, actualmente conducido por Edith Hermida. Allí, la comunicadora y su amor mantuvieron un risueño ida y vuelta. “Me agarró la cuarentena con este señor adentro de casa…”, arrancó Ventura entre risas.
"Más allá de las bromas, es lo mejor que me pudo pasar" le dijo él mirándola a los ojos. Any se emocionó.
Luego le dio paso a Fernando, que continuó con un divertido conteo de anécdotas. “Es una triste historia... En la noche en que el presidente dictó la cuarentena, doce menos cinco de la noche, lamentablemente, estábamos juntos. Any se levantó, cerro la puerta con llave y me emplazó: "te quedas o te vas ahora”.
Siempre sonriente, el hombre agregó que “ella me dijo “Acá tenés casa …la comida la ponés vos". Le pregunté si tenía una birome, y me respondió que yo la necesitaba para firmar la afiliacion al Partido Justicialista. Es una extorsión…”, reclamó el novio, extrovertido.
Ni lerda ni perezosa, Any acotó: “con lo que a mi me gusta levantar el dedito y mandar, y a él no le gusta obedecer, nos divertimos todo el día. Nunca pensé que iba a tener que convivir por obligación…”, bromeo.
Desopilante, Feinsiber continuó. “El despertador de Any suena a las 8. Hay que venir con la escoba y el paño para repasar la casa. Despues, desayunamos y tengo una horita… Se come a las 12:30 porque a las 14 tiene programa de radio. Estoy pensando, 22 días mas tarde, que es de las cosas mas hermosas que me pasaron en mi vida…”,
Como se decía en una época, qué lindo que la gente se quiera, a pesar de todo…
