En los festejos de Mauro Icardi por un nuevo título del Galatasaray quedó muy a la vista una portentosa curiosidad: estaban los hijos de la China Suárez, nueva pareja del goleador, pero no las nenas de él, que se quedaron en Buenos Aires con su mamá y ex esposa del delantero, Wanda Nara. A partir de todas las conjeturas que se tejieron alrededor de ese hecho y después de ser acusado de "olvidarse" de sus hijas en ese momento de alegría y gloria, el futbolista contestó y se animó a contar, por primera vez, el drama que viven las menores.
En una carta que publicó en sus espacios digitales, el "Bomber rosarino", como lo llamaban en Italia cuando jugaba primero para la Sampdoria y luego para el Inter de Milán, aseguró que "Así de nerviosas, impotentes y guiomadas están mis hijas, en un círculo de gente que las manipula constantemente". Sobre ese escrito se puede observar una nena que agarra la mano de un mayor de una manera un tanto temblorosa y con poca energía, algo que parece sobrar en la otra extremidad, la de la persona grande.
"Están con un círculo de gente- siguió Icardi- que les impiden habar con el padre, les impiden verme... pero cuando me ven cuentan todo... se relajan, disfrutan en un ambiente familiar y son niñas felices". En el reciente intento de revinculación suya con las nenas, cuyos nombres son Isabella y Francesca, se las vio jugar tanto con él como con La China Suárez y sus hijos. No fue un dato menor: la justicia le había pedido a la actriz que se abstuviera de participar en esos momentos y el intento de regenerar el vínculo fue para atrás.
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Precisamente a la China se refirió Icardi al continuar su manuscrito. "Quieren echarle la culpa a mi parea por celos, caprichos u obsesión de la mare distorsionando la realidad en programas baratos con tal de figurar púbicamente" dijo en algo que fue tomado como un ataque directo a los ciclos chimenteros que se están haciendo un picnic, desde hace años, con todas sus aventuras (y desventuras) amorosas.
MAURO ICARDI BLANQUEO EL DRAMA QUE VIVEN SUS HIJAS CON WANDA NARA
En cuanto a su situación personal, Mauro intentó gritarle al mundo -pero en especial a su ex, la siempre polémica y multimediática Wanda Nara- que "síiii, estos feliz, estoy enamorado, estoy en paz después de 11 años. Estoy con la mujer que quiero estar, una madre ejemplar con sus hijos y con mis propias hijas. A las pruebas de diciembre me remito".
"Ellas -aseguró con una confianza inabarcable- van a estar hoy y siempre en mi vida!!". Después lanzó un fuerte aviso: "Me voy a mostrar públicamente porque no le debo ada a nadie y no tengo por qué esconderme de nada. No pierdan el tiempo con estupideces que no me mueven un pelo". Y aunque no quedó del claro a quien se refería en su última afirmación, sonó a declaración de guerra. Preparen, apunten...
