En poco más de tres años, la vida de Noelia Marzol hizo un giro rotundo, puntualmente, desde que conoció a Ramiro Arias, el hombre con el que la bailarina se lanzó a concretar su sueño de formar una familia, primero con Donatello y, dentro de muy poco, con Alfonsina, su segunda hija.
“Hoy se cumplen tres años desde que me convertí en la persona más feliz del mundo. Desde que te vi por primera vez en esa función a hoy, mi vida no dejó de potenciarse en todos los sentidos”, escribió Noelia el último 27 de septiembre, al recordar esa noche en la que conoció a Ramiro.
Es que la bailarina y el futbolista se vieron por primera vez en un contexto muy sexy, el de Sex, viví tu experiencia. Y si bien la atracción entre los dos fue inmediata, tuvo que pasar un tiempo para que se concretara una cita, en principio, por los prejuicios de Marzol.
En diálogo con GENTE, Noelia contó lo que le pasó cuando lo vio en el teatro, una y otra vez, decidido a capturar su atención. "Lo ví a Ramiro y me encantó. Además, él fue súper insistente: venía a todas las funciones de Sex, me escribía por Instagram y, finalmente, logró que empezáramos a hablar”, dijo.
“Al principio me chocaba la diferencia de edad -soy 6 años más grande que él- y encima yo tenía una idea fija: quería ser mamá. No es simple conocer a alguien y, en la primera cita, confesarle: ´Mirá que yo quiero tener un hijo pronto´”, contó.
De hecho, ese tema les significó un primer distanciamiento en su relación. Pero luego de un tiempo, él volvió decidido: quería ser ese hombre en la vida de Noelia. "Quiero formar una familia con vos", recuerda hoy que le dijo su pareja, tras pensarlo bien.
Noelia dijo que le enamoran “un montón de cosas” de Ramiro. “En principio, físicamente me encanta y creo que no podría haber elegido un padre mejor para mis hijos. Tal vez, hoy, lo que más valoro de él es que me quiere como soy”, reconoció.
Y agregó: “Me deja tomar decisiones con total libertad y él disfruta de mi trabajo sin prejuicio alguno. No me cuestiona, no me cela y, ojo, lo aclaro: no siento que sea falta de amor, todo lo contrario”.
“Ramiro entiende perfectamente que mi personaje de mujer sexy es, justamente, eso: un personaje y mi trabajo", cerró, feliz de la relación sana que logró encontrar en el defensor del Club Villa Dálmine, de Campana.
