Hace poco más de seis meses que Noelia Marzol mantiene una relación a distancia con el empresario gastronómico Marcos Baldovino, y a pesar de que ya hubo presentación familiar, todo un indicador de que la cosa marcha en serio, ninguno de los dos tiene pensando cambiar de código postal. Encontraron el equilibrio perfecto para no desatender sus compromisos laborales y mantener la pasión como el primer día: cada fin de semana alguno de los dos arma el bolso y viaja al encuentro del otro.
Y aunque ella reconoció que no fantaseó nunca con el casamiento, si Marcos se lo propone no dudaría en decirle que sí: “Nosotros queremos todo, pero tratamos de ir a paso a paso”, reconoció Marzol. Mientras tanto, disfrutan de la adrenalina de los primeros meses de enamoramiento, de la cuota extra que aporta el extrañarse y de sacarle provecho a cada uno de sus encuentros. Después de terminar la temporada de verano en Carlos Paz haciendo Bien Argentino y de cumplir con algunos compromisos, Noelia emprendió un viaje en compañía de su novio rumbo a la costa oeste de Estados Unidos: el primer destino que visitaron fue la pintoresca ciudad de San Francisco y, desde allí, compartieron una romántica postal con el emblemático Golden Gate como telón de fondo.
Sin dudas, la muchacha necesitaba un respiro, no sólo porque tuvo una intensa temporada sino porque, además, venía del exigente ritmo que impone participar del Bailando por un sueño. Mira como siguió el mágico viaje...
El trip comenzó en San Francisco.
Pasó por Los Angeles y...
...terminó en Hawai.
