En el día del cumpleaños número sesenta de Maradona sonaron todas las alarmas. Es que a la alegría de volver a ver al ídolo en la cancha, de inmediato le ganó la preocupación. A Diego se lo veía muy mal, caminando con ayuda como un anciano, con el tapabocas corrido de lugar; un espectáculo triste del que nadie hubiera querido ser testigo.
El astro casi no hablaba y se lo notaba ausente en la que sería su última presentación oficial en el estadio de Gimnasia y Esgrima de La Plata, que provocó conmoción y angustia ese 31 de octubre.
Y ahora, en el marco de la investigación por su muerte, se dieron a conocer nuevos chats del cuerpo médico que dan cuenta del plan siniestro que emprendieron para llevar al Diez a ese festejo organizado por la AFA, a como diera lugar.
En las conversaciones entre Leopoldo Luque y Agustina Cosachov, médico personal y psiquiatra de Diego, respectivamente, se revelaron los intentos de los profesionales para que su paciente estuviera “presentable” por pedido expreso de Matías Morla.
Pocos días antes del evento, Luque y Cosachov debatían que Diego podría tener “demencia alcohólica” o “rasgos de Parkinson”. Además, hablaban de “una internación domiciliaria” en el country de Brandsen, donde vivía en ese momento.
“Hay cambio de planes. Se descarta la internación domiciliaria. Matías quiere un certificado de que Diego está orientado en tiempo y espacio”.
“Tiene que haber una ambulancia de alta complejidad, enfermeros varones, especializados en adicciones, y tenemos que convocar un médico clínico, un toxicólogo y un neurólogo especializado en adicciones", decían.
Pero el 26 de ese mes, todo cambió: “Hay cambio de planes. Se descarta la internación domiciliaria”, le dijo Luque a Cosachov. “Matías quiere un certificado de que Diego está orientado en tiempo y espacio”, agregó.
“¿Orientado? Jaja”, expresó la psiquiatra. A lo que el neurólogo le contestó: “Bueno, vos poné que, cuando lo viste, lo viste bien”.
“Se viene el cumpleaños. Hay que reducirle la medicación para que pueda estar presentable”.
Así lo hizo Cosachov, que el 20 de octubre firmó un certificado donde aseguró “Maradona se encuentra perfectamente orientado en tiempo y espacio”. Sin embargo, los investigadores pudieron comprobar que la mujer nunca se presentó en Campos de Roca para verificar el real estado de Diego.
“Se viene el cumpleaños. Hay que reducirle la medicación para que pueda estar presentable”, se lee en sus chats el 29 de octubre, dos días antes del homenaje donde tan mal se lo vio al DT, que se supo que consumía alcohol en exceso y que ingería más de diez pastillas de Alplax diarias.
El final de ese nefasto plan, es de público conocimiento.
