En una entrevista en el programa A la Tarde de América, Luis Ventura reveló detalles de la nueva vida de Giselle Rímolo, quien se encuentra en libertad condicional desde el 2021. Según Ventura, Rímolo ahora se hace llamar Mónica Gainedú y atiende a sus pacientes en un departamento en la zona norte del país.
En el informe el presidente de APTRA detalló a que se dedica y como luce ahora la revolucionaria "médica" de los 90: "Ante todo quiero decir que a partir de varias intervenciones quirúrgicas ha cambiado radicalmente su formato facial, ha oscurecido su pelo, es otra persona y justamente en ese cambio físico hay un cambio en su identidad que utiliza su verdadero nombre, que es Mónica"
En el relato también se explayó sobre como es su nueva tarea en el mundo médico: “Hace tiempo que (...) asiste a un centro de estética en San Isidro, es atendida, donde le cambiaron radicalmente su físico y también su forma." Continuó hablando que desde ese entonces volvió a atender de forma clandestina: "A partir de ahí Rímolo empezó a operar en un departamento de zona norte donde las puertas no están abiertas a los pacientes, sino que para poder ingresar a esa ‘capilla’,(...), hay que ante todo establecer un vínculo de certificación del paciente de quién va a ahí, ya sea por medio de documentos de identidad y de confianza.
Por último confirmó que de hacerse pasar por médica, podría ir a la cárcel otra vez: "Algunos dicen que Giselle Rímolo es la directora de un nuevo negocio que tiene que ver con la medicina. Otros dicen que en realidad cumple algunas consultas de doctorado, lo que la pondría en riesgo nuevamente de volver a la cárcel en caso de ser comprobado que ella atiende como doctora y no que recibe pacientes como administradora de un centro”.
Un dato no menor que arrojó Ventura fue el de su situación económica: “Ella nunca dejó de ser millonaria. A lo mejor trabaja para ocupar su tiempo, o porque es una pasión que no puede abandonar”.
ASÍ FUE COMO ENCARCELARON A GISELLE RÍMOLO
La "doctora" se hizo conocida a finales de los años 90 como pareja del conductor de televisión Silvio Soldán, y por su supuesta actividad como nutricionista y homeópata. Sin embargo, en 2001, un informe del programa Telenoche la expuso como una charlatana que ejercía ilegalmente la medicina y que recetaba medicamentos que había contrabandeado en su clínica.
La situación se agravó aún más cuando se supo que Lilian Díaz una de sus pacientes, había muerto por la ingesta de medicamentos recetados por Rímolo. Tras varios años de proceso judicial, en 2012, el Tribunal Oral Criminal N°7 la encontró culpable de la muerte de Díaz y la condenó a nueve años de prisión. A pesar de esto, Rímolo siguió en libertad debido a las apelaciones de sus abogados, hasta que en 2017 la Corte Suprema de Justicia confirmó su culpabilidad y fue arrestada en la casa que compartía con su pareja y abogado en Don Torcuato. Desde 2021 se encuentra en libertad condicional.
