La oportunidad no siempre está en la palma de la mano. A Bárbara Amaral, la actriz brasileña que trascendió en Campanas en la noche, la ficción que se vio por Telefe, le llevó miles de kilómetros de distancia. Apasionada por la actuación, fue tras su sueño y tuvo su gran oportunidad en nuestro país.“En Brasil, la producción es mucho más grande porque el país lo es también. Tiene muchas producciones pero es muy difícil entrar a la industria y ser parte. Estaba cansada. ¿Viste cómo es la vida del actor? Y vi la oportunidad de formar parte de la escuela de actuación de Telefe, me postulé desde allá, les mandé un video y quedé seleccionada para un casting en persona. Me vine para ese fin y me volví a mi país. Y cuando me dijeron que estaba seleccionada para la etapa siguiente decidí mudarme a Buenos Aires, sin saber si iba a quedar para las etapas siguientes. Me gustó el país cuando vine por primera vez, no sé por qué sentí que iba a tener una oportunidad acá. Y así fue…”.
–¿Qué vino después, una vez que quedaste elegida?
–Estudié con ellos durante ocho meses. Y cuando se terminó, igual me quedé acá. No sé por qué estaba convencida de que algo lindo me iba a pasar. Mientras tanto, claro, trabajaba de otras cosas. Hasta que, al año siguiente, me llamaron para hacer el casting de Campanas en la noche. No sabía que iba a ser la protagonista de la web y la coprotagonista en la tele. Sinceramente, pensé que sería sólo para una participación. Ya hace tres años que estoy acá. Fue dificultosa la adaptación. Yo no hablaba como lo hago ahora. Ahora, sé que no hablo perfecto, que se nota que no soy de acá, pero hago un esfuerzo enorme para que no se me note, por una cuestión de trabajo. Después, de las cositas chiquitas de todos los días, me iban a pasar en cualquier país, así que eso nunca me preocupó. Me acostumbré rápido, rápido a la comida, porque acá se come muy rico. Eso sí, como soy vegetariana nunca probé el asado de acá. Me encanta todo lo dulce.
–Existe la disputa eterna futbolera con Brasil. ¿Alguna vez te la hicieron sentir?
–Por el contrario, me encanta que la gente nos reciba tan bien a los brasileños. Jamás, jamás, jamás me sentí mal por ser brasileña. Siempre me trataron súper. Y si tengo que hacer un balance de lo que fue mi primera experiencia como actriz acá, te diría que no es fácil porque arranqué con un coprotagónico. Imaginate que eso tiene un peso, pero de una me di cuenta de que tenía los mejores actores a mi lado. Lo que me costó fue el acento, miré muchos videos de entrevistas a brasileños en español, y tuve que adaptar todo el guion de la novela. No fue sencillo, pero al final me encantó el trabajo, estoy súper contenta, agradecida.
–¿Tenés pensado armar una vida acá?
–Por ahora sí… Tengo algunas propuestas laborales que estoy viendo. Hay que esperar, no depende sólo de mí. Pero me encantaría quedarme acá. Me imaginé que iba a ser lindo estar aquí, pero te soy sincera: superó mis expectativas de lo que me esperaba. Pero para quedarme, obvio, tengo que tener propuestas y trabajo acá, si no, no tiene sentido.
–Se te ve súper delgada, ¿es por una dieta?
–Hace cinco años que soy vegetariana posta. Pero desde muy chica ya no me llamaba la atención comer a un animal muerto. Preferí respetar que es un ser vivo y no comerlo. Siempre fui flaca, jamás tuve otra contextura. Yo como bien, entreno con un personal trainer todos los días, tengo una nutricionista, hacemos una dieta para ganar masa muscular, pero no tiene nada que ver, es genética. Estoy muy contenta porque no me privo de nada, más acá, que lo dulce es lo más del mundo.
Bárbara Amaral, una brasileña enamorada de Baires
Bárbara Amaral, una brasileña enamorada de Baires
