El cantante colombiano fue entrevistado en la calle y habló sobre el particular trato que tiene con la madre de su esposa.
Camilo y Evaluna tienen una historia de amor similar a las de Disney, la cual fue coronada y bendecida con el nacimiento de Índigo, pero no todo se trata de su matrimonio o su pequeña, sino que el cantante reveló un particular pacto que tiene con su suegra, Marlene Rodríguez.
En una entrevista que le realizaron mientras caminaba por la ciudad confesó que es fanático de los outfits de la esposa de Ricardo Montaner, por lo que de vez en cuando le pide ropa prestada, pero la particular anécdota no quedó ahí, ya que también sostuvo que usa los pantalones de su mujer y ella los suyo.
"De vez en cuando me pongo la ropa de mi suegra y ella se pone la mía también. Mi suegra está siempre muy bien vestida, tiene cosas increíbles, entonces cada vez que hay algún evento yo le digo: ‘suegra, préstame algún pantalón o una chaqueta´. Mi esposa y yo compartimos pantalones, le quedan", afirmó.
Anteriormente Camilo contó que junto a Evaluna se comieron la placenta de la cual nació su hija, lo que provocó un mar de críticas tildándolos de asquerosos y hasta los acusaron de estar metidos en la tan famosas secta creada por Ricardo Montaner: “Le pusimos aceite de oliva y nos lo comimos”.
Tras conocerse la noticia, en el programa de Ariel Rodríguez Palacios le preguntaron a Mica Viciconte si ella había hecho lo mismo, a lo que contestó asqueada: “¿Qué? ¡No! No me la comí, aparte es un asco. No es que quiero más o menos a mi hijo por comer placenta, pero no lo hago. Yo vi como sale todo eso y la verdad… ¡Qué estómago! Todo bien, pero no, pasó".
En otra entrevista, Camilo contó a quién cree que se parece Índigo: "A mi manera de ver, es idéntica a Evaluna. Es una foto exacta de mi esposa. Pero, tiene los pies míos. Descubrí que si le colocas el dedo en el centro del pie, abre los deditos. Y si se lo pones arriba, aprieta".
Luego, Camilo afirmó sobre quién cambia los pañales a la beba: "La delegación higiénica soy yo. Los pañales los cambio yo todos. Excepto cuando está mi papá y me pide que lo deje una vez. Pero el resto, desde que nació, yo los he cambiado todos. Porque Evaluna está lactando y esa es una labor de tiempo completo. Y (cuando le cambio los pañales a Índigo) es como mi momento de conectar, de conversarle".