Conocedor del mundo de los medios, llamó y mucho la atención un gesto que tuvo Marcelo Tinelli con la prensa en las últimas horas. Al retirarse del teatro Colón, el conductor evitó hablar con los cronistas y se fue con "actitud de divo", a menos de un mes de oficializar su separación de Guillermina Valdés.
Finalizado un desfile en el Salón Dorado del legendario centro cultural donde Juanita, su hija, dio uno de sus primeros pasos en las pasarelas locales, Marcelo sorprendió con su actitud hacia los trabajadores, cronistas y cámaras.
Al retirarse por la puerta trasera del lugar, sobre Calle Cerrito, en pleno Centro porteño, Tinelli evitó hacer cualquier tipo de declaración aludiendo a que tenía que ir a buscar a su hija, que acababa de lucirse en la pasarela.
"Tengo que irme con Juani. Lo quiero mucho a Ángel, pero no puedo. ¡Chau, chau, chau!", aseguró Marcelo, cerrando la puerta del auto que lo pasó a buscar, en el vivo de LAM, en las noches de América. Y eso despertó la dura reacción de Angel De Brito.
El conductor del periodístico de espectáculos se mostró molesto con el comportamiento de Tinelli para quien trabajó durante años en el jurado de el Bailando por un sueño y, después, condujo uno de sus programas satélites, el Cantando por un sueño.
"¡Pésimo Tineli que no se puso la cucaracha y habló con nosotros!, ¡Le he dado mi vida, mi juventud! Tinelli dijo que estaba apurado porque dijo que qué tenía que hacer... Ya nos vamos a encargar de este tema", advirtió de Brito a Marcelo.
